Mostrando entradas con la etiqueta Jean-Pierre Améris. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Jean-Pierre Améris. Mostrar todas las entradas

Tímidos anónimos - Jean-Pierre Améris (2010)

cartel, carteles, cine, póster, películaTítulo original - Les émotifs anonymes
Año - 2010
Duración - 80 min.
País - Francia
Director - Jean-Pierre Améris
Guión - Delphine Régnier-Cavero, Philippe Blasband, Jean-Pierre Améris
Música - Pierre Adenot
Fotografía - Gérard Simon
Productora - StudioCanal / Pan Européenne Production / RTBF / Toto & Co Films / France 3 Cinéma / Toto & Co Films
Género - Comedia, romántica
Reparto - Isabelle Carré, Benoît Poelvoorde, Lorella Cravotta, Lise Lametrie, Swann Arlaud, Pierre Niney, Stephan Wojtowicz, Jacques Boudet, Grégoire Ludig, Céline Duhamel


Jean-Pierre Améris nos ofrece una nueva comedia romántica con el estilo inconfundible francés. Una película sencilla en la que, en apenas 80 minutos, asistimos a los intentos desesperados por vivir de dos personas, con problemas para llevar una vida social normal debido a su timidez. Nada que ver con las que se realizan al otro lado del atlántico y basada en la que es su gran baza, la sencillez.

actor, actores, actrices, actriz, cine, película

Angélique (Isabelle Carré) y Jean-René (Benoît Poelvoorde) son dos personas marcadas por su extrema timidez, la cual intentan llevar en secreto. La mutua pasión que sienten por el chocolate hará que sus vidas se crucen, despertando entre ambos una atracción inconfesable. ¿quien dará el primer paso?

actores, actrices, reparto, cine, películaNo me puedo contar entre una de esas personas a las que la timidez atenaza constantemente en su vida diaria, pero si hay algo que ha sido una constante en mi vida, la dificultad para expresar de forma clara muchos de mis sentimientos. Quizás sea ese uno de los motivos por los que, al menos en parte, me siento identificando con esta película y por lo que he disfrutado de ella, como quizás muchos no lo hagan.

Jean-Pierre Améris nos cuenta la historia que quiere, de una forma breve para no empalagar al espectador. Y lo hace con imágenes cálidas, sencillas y llenas de dulzura, como el exquisito chocolate que elaboran sus protagonistas. Para ello entrega todo el peso de la historia a sus dos protagonistas, empleando como meras piezas de tablero al resto del reparto. Su humor es sutil, rozando el ridículo en muchas ocasiones y muy alejado del humor directo y chabacano que hacemos normalmente en España. Por ello gusta a algunos y produce aburrimiento a otros.