Mostrando entradas con la etiqueta Martin Ritt. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Martin Ritt. Mostrar todas las entradas

Hud: El más salvaje entre mil - Martin Ritt (1963)

Hud, Martin, RittTítulo original - Hud
Año - 1963
Duración - 112 min.
País - Estados Unidos
Director - Martin Ritt
Guión - Irving Ravetch y Harriet Frank Jr.
Música - Elmer Bernstein
Fotografía - James Wong Howe
Montaje - Frank Bracht
Producción - Irving Ravetch y Martin Ritt
Productora - Paramount Pictures
Género - Drama
Reparto - Paul Newman, Melvyn Douglas, Patricia Neal, Brandon De Wilde, Whit Bissell, Crahan Denton, John Ashley, Val Avery, George Petrie, Curt Conway, Sheldon Allman, Pitt Herbert, Carl Low, Robert Hinkle, Don Kennedy, Sharon Hillyer, Yvette Vickers


Irving Ravetch y Harriet Frank Jr. fueron los creadores del guión de este drama sureño dirigido por Martin Ritt. Un trabajo de una dureza innegable, camuflada tras su amable, e incluso divertido inicio, en el que el bueno de Paul Newman comenzaba a dejar claro que escribiría páginas de oro en la historia del cine. Una película adelantada a su época, donde destaca la fotografía de James Wong Howe y el enorme trabajo de todo su reparto. Ineludible si sois fans de Newman y muy recomendable, lo seáis o no.

Hud, Martin, Ritt

Sinopsis: Los Bannon son una familia de ganaderos poco convencional. Hud (Paul Newman) es un hombre rudo y de pocos principios, que no tiene una buena relación con Homer (Melvyn Douglas), padre de este y el encargado de llevar el rancho con mano firme. Entre ambos existe una relación de necesidad/odio de la que saltan chispas constantemente. Junto a ellos vive el joven Lon (Brandon De Wilde), sobrino de Hud, al que admira en varios aspectos, pero al que se parece muy poco. El lado femenino lo pone Alma (Patricia Neal), la empleada que lleva la casa desde hace años. Todo se complicará con la aparición de una de las reces muerta y la sospecha de que una grave e incurable enfermedad haya sido la causante, lo que obliga a poner al resto del ganado en cuarentena hasta saber la causa.

La película: Hud es uno de esos trabajos que parecen fuera del contexto en el que se realizó, principalmente por parecer mucho mas actual de lo que su fecha de creación indica, algo realmente difícil de encontrar en los años 60. Su dureza es indudable, aunque en un principio la historia fluya de forma mucho mas amable de lo que en realidad acabará siendo, haciendo incluso que el espectador esboce una sonrisa en varias ocasiones, algo que conforme avance el metraje irá desapareciendo, para dar paso a otro tipo de sensaciones menos entretenidas, pero no por ello peor conseguidas.

Gran parte de la culpa de ello la tiene el magnífico guión escrito por Irving Ravetch y Harriet Frank Jr., un perfecto retrato de una familia que vive constantemente en el filo de la navaja, en la que los roces son constantes y a la que solo le hace falta una pequeña chispa para explotar. Sus personajes están magníficamente desarrollados en el, dándonos una idea exacta de como son cada uno y que los mueve, haciendo además que poco a poco conozcamos el porqué son o se comportan así. El drama está perfectamente suavizado en un principio, aumentando progresivamente conforme avanza la película, para finalizar de una forma poco común en la época, algo que cuando la vean (o si ya la han visto) podrán comprobar.

Hud, Martin, Ritt

Su riqueza hace que por delante de nuestros ojos pasen dos maneras muy diferentes de ver la vida, la que poco a poco va desapareciendo de nuestras sociedades, esa que se basa en la honradez, en lo que es justo y éticamente correcto, perfectamente representada en la persona de Melvyn Douglas, frente a la que vive la vida sin prestar atención a las consecuencias de sus actos, de forma amoral y capaz de pasar por encima de quien haga falta para conseguir sus propósitos. Pero lo que mas llama la atención en ella, es que lejos de tomar partido por uno u otro bando, lejos de ejercer esa manipulación moral tan habitual en el cine de la época, se limita a mostrar los hechos, e incluso a exponer los motivos por los que cada cual ha llegado a ser como es, para finalmente mostrarnos sus consecuencias en el caso que nos atañe.