* Año - 2004
* Duración - 98 min.
* País - Reino Unido
* Director - Danny Boyle
* Guión - Frank Cottrell Boyce
* Música - John Murphy
* Fotografía - Anthony Dod Mantle
* Productora - Pathe Pictures / Fox Searchlight Pictures
* Género - Drama
* Reparto - Alexander Nathan Etel, James Nesbitt, Daisy Donovan, Lewis Owen McGibbon, Christopher Fulford, Pearce Quigley, Jane Hogarth
* Web Oficial - http://www2.foxsearchlight.com/millions/
Danny Boyle realizo un punto y aparte en su carrera con esta producción protagonizada por los sorprendentes debutantes Lewis McGibbon y Alex Etel, eso si, bien arropados por los veteranos Daisy Donovan y James Nesbitt. Un trabajo con personalidad propia donde el surrealismo es un protagonista mas, como casi siempre ocurre con las obras de Boyle.
Los hermanos Anthony (Lewis McGibbon) y Damian (Alex Etel) cojen caminos opuestos tras la muerte de su madre. Mientas Anthony de 9 años acepta su situación con realismo, su hermano pequeño apuesta por la fantasía y la fe, dejando fluir sin control a su imaginación. La vida de ambos dará un giro al aparecer una maleta llena de Libras esterlinas que tendrán que gastar antes de que el cambio al Euro sea una realidad en su país.
Danny Boyle se caracteriza por ser autor de un cine de calidad, que no gusta a todos por igual. Tiene sus detractores y seguidores por la manera en la que enfoca muchos de sus proyectos. Lo que está claro es que es un cine muy alejado de la calificación de familiar. Títulos como Trainspotting (1996), La playa (2000) o 28 días después (2002) nada tienen que ver con Millones, con el que el director aborda una película pensada para un publico mas amplio, sin dejar por ello de imprimirle su sello particular.
La moralidad de los personajes, como reaccionan a cada situación, que camino encojen ante ellas son denominadores comunes en toda su obra. Pero en este caso utiliza para ello a dos desconocidos que son una de las sorpresas del film. Su interpretación es excelente, muy natural para tratarse de niños. Sus nombres son Alexander Nathan Etel y James Nesbitt, a los que habrá que estar muy atentos ya que tienen un futuro bastante esperanzador.
La historia esta muy bien contada, repleta de constantes mensajes en muchas de sus escenas y que, para disfrutarla en todo su esplendor, tendremos que ver con los ojos de Damian, un niño de 7 años. Si no eres capaz de verla así te aconsejo que no malgastes tu tiempo y lo dediques a otros quehaceres. Destaca también la hermosa fotografía de Anthony Dod Mantle, donde el colorido y la luminosidad forman parte integrante de cada toma.
Y por supuesto la magnifica banda sonora que nos acompaña durante todo el metraje, de esas que hay que guardar en un rinconcito para disfrutarla de vez en cuando. En ella encontramos temas variados como 'Blackout' de Muse, 'Hitsville U.K.' de Clash, 'La Petite Fille de la Mer' de Vangelis o 'Nirvana' de El Bosco.
Por todo ello deberías dejar de lado las ideas preconcebidas e intentar disfrutar de esta fábula para adultos que hay que ver desde los ojos de un niño. Cine diferente que no deja a nadie indiferente.
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