Año - 2015
Duración - 82 min.
País - Irán
Director - Jafar Panahi
Guión - Jafar Panahi
Fotografía - Jafar Panahi
Montaje - Jafar Panahi
Producción - Jafar Panahi
Reparto - Jafar Panahi junto a un grupo de actores y actrices no profesionales
Productora - Jafar Panahi Film Productions
Género - Documental, Drama (Falso documental)
Varios años han pasado ya desde que al bueno de Jafar Panahi se le prohibiera hacer cine y salir de su Irán natal, pero como el mismo dice “Soy un cineasta. No sé hacer otra cosa más que hacer películas. Nada puede impedírmelo. Y cuanto más me han empujado a los rincones más alejados, más he conectado con mi interior. El cine como arte se ha convertido en mi principal preocupación. Y seguiré haciendo películas para sentirme vivo”. Desde entonces ha realizado Esto no es una película (2011), Telón cerrado (2013) y la que hoy nos ocupa, trabajos que engrandecen a este arte y lo convierten en una ventana a un país totalmente desconocido para la mayoría de los occidentales. Si como él amas el cine, deberías disfrutarla.
Sinopsis: En esta ocasión Jafar Panahi se coloca a los mandos de un Taxi en la ciudad de Teherán, por el que irán pasando personajes característicos que representan a la población de su país, hombres y mujeres de todo tipo y diferentes niveles sociales que contribuyen a que podamos formarnos una idea de como es la sociedad en la que viven. Un canto a la libertad a través de una película en la que se omite el nombre de los componentes de su reparto para salvaguardar su seguridad.
El director: Jafar Panahi es un director de cine nacido en Mianeh, Irán, el 11 de julio de 1960. Considerado como uno de los más influyentes de la llamada nueva ola iraní, tenía solo diez años cuando escribió su primer libro, con el que ganó un concurso literario, mientras que comenzaba a interesarse por el cine, rodando un par de películas en 8 mm. Tras ello se dedicó a la fotografía y rodó un documental sobre sus experiencias durante la guerra de Irán-Iraq (1980-88), durante la que realizó el servicio militar.
Tras estudiar dirección en la Facultad de Cine y Televisión de la Universidad de Teherán, comenzó rodando varias películas para televisión y trabajó como ayudante del director Abbas Kiarostami en la película A través de los olivos (1994). El primer largometraje de Jafar Panahi como director fue El globo blanco (1995) que ganó la Cámara de Oro en el Festival de Cine de Cannes. El segundo, El espejo (Ayneh) (1997) fue premiado con el Leopardo de Oro en el Festival Internacional de Cine de Locarno. Tras ella dirigió El círculo (Dayereh) (2000), con la que ganó el León de Oro en el Festival de Cine de Venecia y el premio de la FIPRESCI en el Festival Internacional de cine de San Sebastián.
Con Sangre y oro (2003) se alzó con la Espiga de Oro en la Semana Internacional de Cine de Valladolid y el premio del jurado de la sección Un Certain Regard en el Festival de Cannes; con Offside (Fuera de juego) (2005) ganó el Oso de Plata en el Festival de cine de Berlín. El mismo año que realizó el cortometraje The Accordion (2010), pasó 88 días en la cárcel hasta que la presión internacional logró su liberación, aunque esta no pudo evitar la condena de 20 años de inhabilitación para hacer cine, dar entrevistas o salir de Irán. Su delito, “actuar contra la seguridad nacional y hacer propaganda contra el Estado”. A pesar de todo, Jafar Panahi continua luchando por la libertad de su pueblo y denunciando las condiciones en la que vive, sobre todo por los de las mujeres, protagonistas habituales de su trabajo, de la mejor manera que sabe, haciendo cine que se estrena fuera de su país y es visto dentro de el en copias piratas.
La película: Taxi Teherán supone la tercera expresión artística del realizador tras la injusta condena a la que fue sometido por el gobierno de su país. Se trata de un trabajo de esos que deberían de ser vistos por todo el mundo, no solo por los que amamos el cine, sino también por todos los amantes de la libertad, los defensores de los derechos humanos y la sociedad en general, totalmente ajena en su inmensa mayoría a como es el pueblo iraní, sobre todo en el mundo occidental, en el que tendemos a generalizar sin tener el conocimiento suficiente como para juzgar a nada ni a nadie. Su premisa es de lo mas sencilla, llevándonos durante los 82 minutos que dura en el interior de un taxi conducido por el propio Jafar Panahi, por el que pasarán toda una variedad de personajes que representan a la sociedad iraní actual, algo que puede parecer un tanto insulso en un primer momento, pero que consigue captar y mantener la atención del espectador en todo momento, principalmente porque rezuma realidad por los cuatro costados.
Como ocurre en gran parte de la obra del realizador iraní, las mujeres tienen gran parte del protagonismo dentro del film, siendo hábilmente retratadas en el. Desde las mas tradicionales a las mas actuales, de diferentes edades y clases sociales, cada una contribuye a reflejar su situación dentro del país, ya sean maestras, mujeres de a pie, una abogada luchadora por los derechos civiles de sus iguales o la encantadora sobrina del propio Jafar Panahi, que fue la encargada de recoger el Oso de Oro en el Festival de Berlín, donde no pudo evitar llorar desconsolada tras hacerlo, rompiendo el alma a casi todos los presentes.
De lo que no les debe caber ninguna duda es de que Taxi Teherán trasciende lo que es una película habitual, convirtiéndose por derecho propio en un documento único que merece la pena disfrutar. La valentía de Jafar Panahi y su habilidad para mostrarnos una ventana abierta a un país y una población castigadas como pocas, merecen como mínimo que le dediquemos los 82 minutos que dura su metraje. Un claro ejemplo para los que como yo piensan y ven el cine como algo mucho mas profundo que un simple entretenimiento. El tiempo pone a cada cual en su sitio, por lo que la figura del excelente realizador iraní, que ya tiene un lugar de privilegio en la historia del cine de su país y en la del planeta entero, con el paso de los años solo podrá agrandarse. Desde este humilde rincón quiero transmitir mi enorme admiración por su figura y su trabajo, por su amor a este arte y a su pueblo. Si en este mundo hay cosas que cambian para bien es por personas como el.
Fuentes consultadas: Filmaffinity, Wikipedia y Youtube
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