Título original - Haemoo
Año - 2014
Duración - 111 min.
País - Corea del Sur
Director - Shim Sung-bo
Guión - Shim Sung-bo y Bong Joon-ho
Fotografía - Kyung-pyo Hong
Montaje - Jae-beom Kim y Sang-beom Kim
Producción - Bong Joon-ho, Neung-yeon Joh y Lewis Kim
Productora - Lewis Pictures
Género - Drama
Reparto - Kim Yoon-seok, Park Yoo-chun, Ye-ri Han, Seong-kun Mun, Sang-ho Kim, Hee-jun Lee, Seung-mok Yoo, In-gi Jeong, Kyung-Sook Jo
Niebla (Haemoo) supone el debut en la dirección de Shim Sung-bo, que lleva a la gran pantalla un guión escrito por el mismo junto a Bong Joon-ho, que también participa en la producción, basado en una obra de teatro homónima de 2007, que a su vez relata una escalofriante historia real ocurrida en el buque pesquero Taechangho en 2001. Un trabajo en el que destaca su mezcla de géneros, dividido en dos partes bien diferenciadas y solo lastrado por la influencia que el cine occidental ha tenido en su realizador. A pesar de ello resulta un producto de una enorme dureza que mantiene al espectador pegado a la pantalla en todo su metraje, casi siempre con el corazón encogido, resultando muy recomendable.
Sinopsis: El capitán Cheol-joo (Kim Yoon-seok) sobrevive como puede con su viejo barco pesquero de 69 toneladas Jeonjinho, aunque cada vez le resulta mas difícil ganarse la vida con el. Los últimos contratiempos lo han hecho endeudarse hasta un límite imposible de asumir, por lo que tras pedir algo de dinero decide transportar inmigrantes ilegales coreano-chinos para poder recuperarse y volver a su vida normal. Los problemas comenzarán tras contarles sus planes a la tripulación, que aunque acepta a regañadientes, no está preparada para realizar un trabajo de este tipo. Para colmo, el mal tiempo hace que el pesquero entre en un denso banco de niebla en el que la tripulación acabará perdiendo los nervios por completo.
La película: Hace tiempo ya que el cine coreano se abrió al resto del mundo, mostrando sus grandes virtudes y sus escasos defectos, pero esto ha supuesto una metamorfosis en gran parte de sus productos, que además de ver como se amplía y cambia enormemente el público que accede a el, ha adoptado ciertas características del cine occidental que no siempre le sientan bien. Este es uno de los mejores ejemplos que tenemos en la actualidad de dicha cuestión, un trabajo de una calidad indudable, a pesar de ser una ópera prima, que rebosa de la dureza que ha dado fama al cine de su país, pero que no llega a ser redondo por la introducción en el de alguna que otra linea argumental un tanto forzada, de la que no hablaré mas para no alterar la experiencia de quien la vaya a ver.
Pero quiero dejar claro que se trata de un detalle, solo un detalle que no debe de minar vuestras ganas de verla, ya que es una película que merece la pena ser disfrutada, capaz de, tras una primera parte en la que se nos presenta y desarrolla adecuadamente a sus protagonistas y los motivos que lo llevan a aceptar un trabajo ilegal y muy peligroso, realizar un cambio total en su fisionomía y convertirse en un producto totalmente diferente, en el que el espectador presencia asombrado como el giro de los acontecimientos convierten el viaje en una auténtica pesadilla, que acaba intentando sin mucha suerte encontrar en los personajes algún rastro de como eran cuando les fueron presentados.
Es esa la característica que mas destaca en Haemoo, la enorme fuerza con la que su realizador filma una historia que ya de por si resulta bastante cruda, pero que tras pasar por sus manos se convierte en un producto adictivo y sumamente perturbador, algo que nos hace albergar esperanzas sobre el futuro de Shim Sung-bo como director, del que habrá que estar atentos a sus próximos trabajos. El mismo firma también el guión junto al bueno de Bong Joon-ho, director y guionista con gran experiencia que nos ha dejado trabajos como la memorable Memories of Murder (Crónica de un asesino en serie) (2003), que escribió junto al propio Shim Sung-bo y de la que os hablamos en este artículo, Tokyo! (2008), Mother (2009) o la mas reciente Rompenieves (Snowpiercer) (2013), de la que os hablamos aquí.
Un cadáver a los postres - Robert Moore (1976)
Título original - Murder by Death
Año - 1976
Duración - 94 min.
País - Estados Unidos
Director - Robert Moore
Guión - Neil Simon, a partir de su propia obra de teatro
Música - Dave Grusin
Fotografía - David M. Walsh
Montaje - John F. Burnett
Producción - Ray Stark
Productora - Columbia Pictures
Género - Comedia
Reparto - Alec Guinness, David Niven, Peter Sellers, Peter Falk, Eileen Brennan, Maggie Smith, Truman Capote, James Coco, Elsa Lanchester, Nancy Walker, Estelle Winwood, James Cromwell
Neil Simon adaptó su propia obra de teatro para que Robert Moore dirigiese esta magnífica parodia del género detectivesco y policíaco de toda la vida, a la que llamaron Murder by Death (Un cadáver a los postres en España). La fotografía de David M. Walsh, la banda sonora de Dave Grusin, el vestuario de Anne Roth y un excelente reparto totalmente implicado, hacen de este título una película de culto y una excelente opción para pasar un divertido rato ante la pantalla, de la que podrían tomar nota los realizadores que se dedican a parodiar en la actualidad. Ideal para esos momentos en los que te sientes con el ánimo un tanto apagado, para disfrutar en familia o con amigos. Una delicia, no se la pierdan.
Sinopsis: El excéntrico multimillonario llamado Lionel Twain (Truman Capote) invita a cenar a su castillo a los cinco detectives más importantes de la historia: el chino Sidney Wang (Peter Sellers), el neoyorquino Dick Charleston (Peter Sellers), la inglesa Jessica Marbles (Elsa Lanchester), el belga Milo Perrier (James Coco) y el norteamericano Sam Diamond (Peter Falk). Después de ser recibidos por el mayordomo ciego (Alec Guiness), que los conduce a sus aposentos, Twain les explica durante la cena el motivo de la reunión: a medianoche se producirá un asesinato; el que sea capaz de resolverlo ganará un millón de dólares.
El director: Robert Moore fue un director de cine, teatro y televisión estadounidense nacido en Detroit, Michigan, el 1 de febrero de 1927. Ganador de cinco premios Tony por sus producciones en Broadway, actuó como actor en varias películas, casi todas para televisión. Como director dirigió varios telefilms entre los que podemos destacar La gata sobre el tejado de zinc (1976), The Sunshine Boys (1977) o Annie Flynn (1978). Participó en las series The Bob Newhart Show (1974), Paul Sand in Friends and Lovers (1974) y Rhoda (1974 y 1975). Su trabajo como director en cine abarca solo tres títulos: Un cadáver a los postres (1976), Un detective barato (1978) y Capítulo Dos (1979), aunque la que hoy nos ocupa es para mi la mejor de ellas.
La película: Dentro de la comedia, existe un subgénero que vive de parodiar personajes y situaciones fácilmente reconocibles por la mayoría del gran público. En los últimos tiempos no es precisamente de los mas lucidos, al menos en mi modesta opinión, aunque de vez en cuando nos sorprenden con algún trabajo con cada vez menos imaginación. Creo que lo último que vi medianamente bueno fue una de las primeras de la saga Scary Movie. Pero si echamos la mirada atrás en el tiempo nos ha dejado un buen puñado de títulos en la historia del cine, unos mejor que otros, de los que recuerdo con buen sabor de boca algunos como Top Secret! (1984), Agárralo como puedas (1988), Hot Shots! (1991), La loca historia de las galaxias (1987) o Aterriza como puedas (1980). Pero para encontrar algunas de las que ocupan mi lista de honor hay que retroceder un poco mas hasta llegar a títulos como Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores (1975), El jovencito Frankenstein (1974) o El baile de los vampiros (1967). Un cadáver a los postres se encuentra en este selecto grupo, por lo que su visionado es para mi mas que recomendable.
En esta ocasión se utiliza uno de esos escenarios mil veces visto ya en el cine: una mansión apartada, un grupo de personas invitadas a pasar una noche o un fin de semana en ella, una enorme sensación de aislamiento y al menos un asesinato cometido por alguno de sus invitados o el misterioso anfitrión. Por todo ello, lo primero que me vino a la mente en cuanto comencé a verla fue la novela policíaca Diez negritos de la escritora británica Agatha Christie, que fue llevada al cine con el mismo título por René Clair en 1945, aunque aquí sus creadores dan una vuelta de tuerca mas y colocan como sus invitados a varios de los mas famosos detectives de la historia, a los que se les ofrece una atractiva suma de dinero por resolver un asesinato que se cometerá allí mismo.
Año - 1976
Duración - 94 min.
País - Estados Unidos
Director - Robert Moore
Guión - Neil Simon, a partir de su propia obra de teatro
Música - Dave Grusin
Fotografía - David M. Walsh
Montaje - John F. Burnett
Producción - Ray Stark
Productora - Columbia Pictures
Género - Comedia
Reparto - Alec Guinness, David Niven, Peter Sellers, Peter Falk, Eileen Brennan, Maggie Smith, Truman Capote, James Coco, Elsa Lanchester, Nancy Walker, Estelle Winwood, James Cromwell
Neil Simon adaptó su propia obra de teatro para que Robert Moore dirigiese esta magnífica parodia del género detectivesco y policíaco de toda la vida, a la que llamaron Murder by Death (Un cadáver a los postres en España). La fotografía de David M. Walsh, la banda sonora de Dave Grusin, el vestuario de Anne Roth y un excelente reparto totalmente implicado, hacen de este título una película de culto y una excelente opción para pasar un divertido rato ante la pantalla, de la que podrían tomar nota los realizadores que se dedican a parodiar en la actualidad. Ideal para esos momentos en los que te sientes con el ánimo un tanto apagado, para disfrutar en familia o con amigos. Una delicia, no se la pierdan.
Sinopsis: El excéntrico multimillonario llamado Lionel Twain (Truman Capote) invita a cenar a su castillo a los cinco detectives más importantes de la historia: el chino Sidney Wang (Peter Sellers), el neoyorquino Dick Charleston (Peter Sellers), la inglesa Jessica Marbles (Elsa Lanchester), el belga Milo Perrier (James Coco) y el norteamericano Sam Diamond (Peter Falk). Después de ser recibidos por el mayordomo ciego (Alec Guiness), que los conduce a sus aposentos, Twain les explica durante la cena el motivo de la reunión: a medianoche se producirá un asesinato; el que sea capaz de resolverlo ganará un millón de dólares.
El director: Robert Moore fue un director de cine, teatro y televisión estadounidense nacido en Detroit, Michigan, el 1 de febrero de 1927. Ganador de cinco premios Tony por sus producciones en Broadway, actuó como actor en varias películas, casi todas para televisión. Como director dirigió varios telefilms entre los que podemos destacar La gata sobre el tejado de zinc (1976), The Sunshine Boys (1977) o Annie Flynn (1978). Participó en las series The Bob Newhart Show (1974), Paul Sand in Friends and Lovers (1974) y Rhoda (1974 y 1975). Su trabajo como director en cine abarca solo tres títulos: Un cadáver a los postres (1976), Un detective barato (1978) y Capítulo Dos (1979), aunque la que hoy nos ocupa es para mi la mejor de ellas.
La película: Dentro de la comedia, existe un subgénero que vive de parodiar personajes y situaciones fácilmente reconocibles por la mayoría del gran público. En los últimos tiempos no es precisamente de los mas lucidos, al menos en mi modesta opinión, aunque de vez en cuando nos sorprenden con algún trabajo con cada vez menos imaginación. Creo que lo último que vi medianamente bueno fue una de las primeras de la saga Scary Movie. Pero si echamos la mirada atrás en el tiempo nos ha dejado un buen puñado de títulos en la historia del cine, unos mejor que otros, de los que recuerdo con buen sabor de boca algunos como Top Secret! (1984), Agárralo como puedas (1988), Hot Shots! (1991), La loca historia de las galaxias (1987) o Aterriza como puedas (1980). Pero para encontrar algunas de las que ocupan mi lista de honor hay que retroceder un poco mas hasta llegar a títulos como Los caballeros de la mesa cuadrada y sus locos seguidores (1975), El jovencito Frankenstein (1974) o El baile de los vampiros (1967). Un cadáver a los postres se encuentra en este selecto grupo, por lo que su visionado es para mi mas que recomendable.
En esta ocasión se utiliza uno de esos escenarios mil veces visto ya en el cine: una mansión apartada, un grupo de personas invitadas a pasar una noche o un fin de semana en ella, una enorme sensación de aislamiento y al menos un asesinato cometido por alguno de sus invitados o el misterioso anfitrión. Por todo ello, lo primero que me vino a la mente en cuanto comencé a verla fue la novela policíaca Diez negritos de la escritora británica Agatha Christie, que fue llevada al cine con el mismo título por René Clair en 1945, aunque aquí sus creadores dan una vuelta de tuerca mas y colocan como sus invitados a varios de los mas famosos detectives de la historia, a los que se les ofrece una atractiva suma de dinero por resolver un asesinato que se cometerá allí mismo.
The Salvation - Kristian Levring (2014)
Título original - The Salvation
Año - 2014
Duración - 92 min.
País - Dinamarca
Director - Kristian Levring
Guión - Anders Thomas Jensen, Kristian Levring
Música - Kasper Winding
Fotografía - Jens Schlosser
Montaje - Pernille Bech Christensen
Producción - Sisse Graum Jørgensen
Productora - Zentropa Productions
Género - Western, Drama
Reparto - Mads Mikkelsen, Eva Green, Jeffrey Dean Morgan, Michael Raymond-James, Sivan Raphaely, Douglas Henshall, Mikael Persbrandt, Jonathan Pryce, Eric Cantona, Alexander Arnold, Nanna Øland
Fabricius, Toke Lars Bjarke
Kristian Levring escribe el guión junto a Anders Thomas Jensen y dirige este nuevo acercamiento a un género que no da muchas alegrías a sus aficionados últimamente, el Western. Con un excelente ritmo, la fotografía de Jens Schlosser y la participación de Eva Green, Mads Mikkelsen y Jeffrey Dean Morgan en sus papeles principales, estamos ante un producto un tanto atípico, pero que alcanza muy buenos resultados. Una muy buena opción para los incondicionales del género y el público en general.
Sinopsis: Jon (Mads Mikkelsen) y su hermano Peter (Mikael Persbrandt) son dos antiguos soldados daneses que emigraron al continente americano tras participar en la guerra contra Alemania, buscando un futuro mejor. Tras siete largos años en los que han conseguido establecerse y vivir honradamente, Joe espera ansioso la llegada de su mujer Marie (Nanna Øland Fabricius) y a su hijo Kresten (Toke Lars Bjarke), para poder continuar con su vida donde tuvo que dejarla. El problema es que el pueblo mas cercano a las tierras donde viven está dominado por el asesino Henry Delarue (Jeffrey Dean Morgan) y sus hombres, algo que les traerá problemas y pondrá a prueba la capacidad de supervivencia de Jon.
El director: Kristian Levring es un director danés nacido el 9 de mayo de 1957. Se trata del cuarto miembro que firmó el Manifiesto Dogma 95 junto a Lars von Trier, Thomas Vinterberg y Soren Kragh-Jacobsen. En el 2001 dirigió junto a Lars von Trier y Søren Kragh-Jacobsen el thriller para televisión D-dag - Den færdige film, además de rodar en solitario el drama The King Is Alive (El rey está vivo). Su siguiente trabajo fue el thriller dramático The Intended (2002). Tras un parón de seis años, en cuanto a ficción se refiere, dirigió No me temas (Sin miedo) (2008), un nuevo thriller dramático que supuso su último trabajo anterior a The Salvation, la que hoy nos ocupa.
La película: Basta con echar un rápido vistazo a la corta filmografía de Kristian Levring para darse cuenta que estamos ante un trabajo en el que el realizador cambia drásticamente de registro, algo que me hizo encarar su visionado con ciertos reparos, a lo que acabó ganando el hecho de encontrar en su reparto a Eva Green y Mads Mikkelsen, dos de los actores actuales de los que procuro no perderme nada de lo que hacen, ya que suele significar que tienen un mínimo de calidad bastante alto. El resultado ha sido bastante satisfactorio, ya que aunque queda bastante claro que Levring es un gran aficionado al género y bebe de varias fuentes para realizarla, a la vez consigue darle a su trabajo un estilo propio que no solo me ha convencido, sino que además me ha hecho pasar un buen rato frente a la pantalla, por lo que se me ha hecho incluso corta.
Y es que si me dicen hace una década que uno de los que firmaron el Manifiesto Dogma 95 iba a co-escribir y dirigir un Western, se hubieran oído las carcajadas desde el Vaticano, llegando a atreverme incluso a apostar fuerte en su contra. Por suerte el cine es en muchos aspectos como la vida misma, evoluciona a la vez que lo hacen los que se encargan de realizarlo, algo sin lo que esto resultaría sumamente aburrido y monótono. Yo mismo he de reconocer que, aunque he visto bastantes Westerns en mi vida, muchos de ellos los disfruté cuando aún no tenía edad para juzgarlos como puedo hacerlo ahora, por lo que no es precisamente este el género en el que mejor me desenvuelvo. Solo les comentaré en este aspecto que se notan en este trabajo algunas influencias del gran Sergio Leone, al igual que recuerda en algunas ocasiones al trabajo del maestro Clint Eastwood, aunque como ya les he comentado antes, Levring consigue dar a su producto cierta originalidad y un estilo propio.
Año - 2014
Duración - 92 min.
País - Dinamarca
Director - Kristian Levring
Guión - Anders Thomas Jensen, Kristian Levring
Música - Kasper Winding
Fotografía - Jens Schlosser
Montaje - Pernille Bech Christensen
Producción - Sisse Graum Jørgensen
Productora - Zentropa Productions
Género - Western, Drama
Reparto - Mads Mikkelsen, Eva Green, Jeffrey Dean Morgan, Michael Raymond-James, Sivan Raphaely, Douglas Henshall, Mikael Persbrandt, Jonathan Pryce, Eric Cantona, Alexander Arnold, Nanna Øland
Fabricius, Toke Lars Bjarke
Kristian Levring escribe el guión junto a Anders Thomas Jensen y dirige este nuevo acercamiento a un género que no da muchas alegrías a sus aficionados últimamente, el Western. Con un excelente ritmo, la fotografía de Jens Schlosser y la participación de Eva Green, Mads Mikkelsen y Jeffrey Dean Morgan en sus papeles principales, estamos ante un producto un tanto atípico, pero que alcanza muy buenos resultados. Una muy buena opción para los incondicionales del género y el público en general.
Sinopsis: Jon (Mads Mikkelsen) y su hermano Peter (Mikael Persbrandt) son dos antiguos soldados daneses que emigraron al continente americano tras participar en la guerra contra Alemania, buscando un futuro mejor. Tras siete largos años en los que han conseguido establecerse y vivir honradamente, Joe espera ansioso la llegada de su mujer Marie (Nanna Øland Fabricius) y a su hijo Kresten (Toke Lars Bjarke), para poder continuar con su vida donde tuvo que dejarla. El problema es que el pueblo mas cercano a las tierras donde viven está dominado por el asesino Henry Delarue (Jeffrey Dean Morgan) y sus hombres, algo que les traerá problemas y pondrá a prueba la capacidad de supervivencia de Jon.
El director: Kristian Levring es un director danés nacido el 9 de mayo de 1957. Se trata del cuarto miembro que firmó el Manifiesto Dogma 95 junto a Lars von Trier, Thomas Vinterberg y Soren Kragh-Jacobsen. En el 2001 dirigió junto a Lars von Trier y Søren Kragh-Jacobsen el thriller para televisión D-dag - Den færdige film, además de rodar en solitario el drama The King Is Alive (El rey está vivo). Su siguiente trabajo fue el thriller dramático The Intended (2002). Tras un parón de seis años, en cuanto a ficción se refiere, dirigió No me temas (Sin miedo) (2008), un nuevo thriller dramático que supuso su último trabajo anterior a The Salvation, la que hoy nos ocupa.
La película: Basta con echar un rápido vistazo a la corta filmografía de Kristian Levring para darse cuenta que estamos ante un trabajo en el que el realizador cambia drásticamente de registro, algo que me hizo encarar su visionado con ciertos reparos, a lo que acabó ganando el hecho de encontrar en su reparto a Eva Green y Mads Mikkelsen, dos de los actores actuales de los que procuro no perderme nada de lo que hacen, ya que suele significar que tienen un mínimo de calidad bastante alto. El resultado ha sido bastante satisfactorio, ya que aunque queda bastante claro que Levring es un gran aficionado al género y bebe de varias fuentes para realizarla, a la vez consigue darle a su trabajo un estilo propio que no solo me ha convencido, sino que además me ha hecho pasar un buen rato frente a la pantalla, por lo que se me ha hecho incluso corta.
Y es que si me dicen hace una década que uno de los que firmaron el Manifiesto Dogma 95 iba a co-escribir y dirigir un Western, se hubieran oído las carcajadas desde el Vaticano, llegando a atreverme incluso a apostar fuerte en su contra. Por suerte el cine es en muchos aspectos como la vida misma, evoluciona a la vez que lo hacen los que se encargan de realizarlo, algo sin lo que esto resultaría sumamente aburrido y monótono. Yo mismo he de reconocer que, aunque he visto bastantes Westerns en mi vida, muchos de ellos los disfruté cuando aún no tenía edad para juzgarlos como puedo hacerlo ahora, por lo que no es precisamente este el género en el que mejor me desenvuelvo. Solo les comentaré en este aspecto que se notan en este trabajo algunas influencias del gran Sergio Leone, al igual que recuerda en algunas ocasiones al trabajo del maestro Clint Eastwood, aunque como ya les he comentado antes, Levring consigue dar a su producto cierta originalidad y un estilo propio.
La habitación (Room) - Lenny Abrahamson (2015)
Título original - Room
Año - 2015
Duración - 118 min.
País - Irlanda
Director - Lenny Abrahamson
Guión - Emma Donoghue, basado en su propia novela
Música - Stephen Rennicks
Fotografía - Danny Cohen
Montaje - Nathan Nugent
Producción - Ed Guiney y David Gross
Reparto - Brie Larson, Jacob Tremblay, Joan Allen, William H. Macy, Megan Park, Amanda Brugel, Sean Bridgers, Joe Pingue, Chantelle Chung, Randal Edwards, Jack Fulton, Kate Drummond
Productora - Film4 / Irish Film Board / Element Pictures
Género - Drama
Estreno en España: 26 de febrero de 2016
Lenny Abrahamson es el director encargado de llevar a la gran pantalla el guión que Emma Donoghue realiza sobre su propia novela, con la que comparte nombre. Me parece increíble que con la enorme cantidad de productos de dudable calidad que soportamos habitualmente, un trabajo de tal calidad no haya sido aún estrenado en España. Tan perturbadora y emotiva como sobria y eficaz. Mención especial al trabajo de la brillante Emma Donoghue y, sobre todo, al del pequeño Jacob Tremblay, cuya indudable química ya hace que merezca la pena disfrutarla.
Sinopsis: Para Jack (Jacob Tremblay), un niño de cinco años, la habitación es el mundo entero, el lugar donde nació, donde come, juega y aprende con su madre Joy Newsome (Brie Larson). Con un reducido espacio y sin ninguna ventana al exterior, han de conformarse con una pequeña claraboya en el techo para recibir algo de luz y ver a través de ella lo que el pequeño imagina que es el espacio. Su madre ha conseguido crear un mundo imaginario con el que poder evadir al pequeño de la dura realidad, pero Jack crece poco a poco, va a cumplir ya cinco años, por lo que cada vez le resulta mas difícil dar respuestas a las cuestiones que el pregunta por su lógica curiosidad.
El director: Lenny Abrahamson es un realizador irlandés nacido en Dublín el 26 de enero 1966. Tras no finalizar un doctorado en Filosofía en la Universidad de Stanford, regreso a su Irlanda natal para dedicarse a su verdadera pasión, el cine. Debutó con la comedia dramática Adam y Paul (2004), a la que siguió el magnífico drama Garaje (2007). Ese mismo año se estrenó la miniserie Prosperity, que estaba protagonizada por un personaje diferente en cada uno de sus cuatro episodios. El drama What Richard Did (2012) y la comedia dramática Frank (2014), además de la que hoy nos ocupa, completan su escueta pero jugosa filmografía.
La película: La habitación (Room es su título original) es uno de esos trabajos que merece la pena ver sin conocer casi nada, o mejor dicho, conociendo lo mínimo sobre el. En mi caso, no había visto siquiera el trailer de la película ni leído la sinopsis, que por cierto, en mi opinión cuenta demasiado en otros portales de cine que posteriormente he repasado, por lo que les aseguro que yo aquí no desvelaré absolutamente nada en relación con su historia, para que puedan tener una experiencia similar a la mía si es que deciden verla, algo que les recomiendo absolutamente. Al final del artículo les dejaré el trailer, como normalmente suelo hacer, pero igualmente les recomiendo que no lo vean, ya que cuanto menos sepan de ella mejor.
Estamos ante una de esas ocasiones en las que das gracias por amar tanto este arte, una de esas que vuelven a demostrar que no es necesario un presupuesto desorbitado si tienes algo grande que contar y sabes como hacerlo, porque el como hacerlo en este tipo de trabajos es lo que lo colocan a este lado de la delgada linea que lo separa de esas películas mediocres que ponen por pares las tardes de los fines de semana en televisión. Ese es para mi el principal acierto de este magnífico producto, dejar a su historia y sus dos protagonistas la importancia que tienen, sin adulterarlas en ningún momento, sin emplear sofisticados medios ni salirse en ningún momento de su enorme sobriedad, para no desviar un solo instante la atención de donde debe permanecer, de sus verdaderos protagonistas.
Año - 2015
Duración - 118 min.
País - Irlanda
Director - Lenny Abrahamson
Guión - Emma Donoghue, basado en su propia novela
Música - Stephen Rennicks
Fotografía - Danny Cohen
Montaje - Nathan Nugent
Producción - Ed Guiney y David Gross
Reparto - Brie Larson, Jacob Tremblay, Joan Allen, William H. Macy, Megan Park, Amanda Brugel, Sean Bridgers, Joe Pingue, Chantelle Chung, Randal Edwards, Jack Fulton, Kate Drummond
Productora - Film4 / Irish Film Board / Element Pictures
Género - Drama
Estreno en España: 26 de febrero de 2016
Lenny Abrahamson es el director encargado de llevar a la gran pantalla el guión que Emma Donoghue realiza sobre su propia novela, con la que comparte nombre. Me parece increíble que con la enorme cantidad de productos de dudable calidad que soportamos habitualmente, un trabajo de tal calidad no haya sido aún estrenado en España. Tan perturbadora y emotiva como sobria y eficaz. Mención especial al trabajo de la brillante Emma Donoghue y, sobre todo, al del pequeño Jacob Tremblay, cuya indudable química ya hace que merezca la pena disfrutarla.
Sinopsis: Para Jack (Jacob Tremblay), un niño de cinco años, la habitación es el mundo entero, el lugar donde nació, donde come, juega y aprende con su madre Joy Newsome (Brie Larson). Con un reducido espacio y sin ninguna ventana al exterior, han de conformarse con una pequeña claraboya en el techo para recibir algo de luz y ver a través de ella lo que el pequeño imagina que es el espacio. Su madre ha conseguido crear un mundo imaginario con el que poder evadir al pequeño de la dura realidad, pero Jack crece poco a poco, va a cumplir ya cinco años, por lo que cada vez le resulta mas difícil dar respuestas a las cuestiones que el pregunta por su lógica curiosidad.
El director: Lenny Abrahamson es un realizador irlandés nacido en Dublín el 26 de enero 1966. Tras no finalizar un doctorado en Filosofía en la Universidad de Stanford, regreso a su Irlanda natal para dedicarse a su verdadera pasión, el cine. Debutó con la comedia dramática Adam y Paul (2004), a la que siguió el magnífico drama Garaje (2007). Ese mismo año se estrenó la miniserie Prosperity, que estaba protagonizada por un personaje diferente en cada uno de sus cuatro episodios. El drama What Richard Did (2012) y la comedia dramática Frank (2014), además de la que hoy nos ocupa, completan su escueta pero jugosa filmografía.
La película: La habitación (Room es su título original) es uno de esos trabajos que merece la pena ver sin conocer casi nada, o mejor dicho, conociendo lo mínimo sobre el. En mi caso, no había visto siquiera el trailer de la película ni leído la sinopsis, que por cierto, en mi opinión cuenta demasiado en otros portales de cine que posteriormente he repasado, por lo que les aseguro que yo aquí no desvelaré absolutamente nada en relación con su historia, para que puedan tener una experiencia similar a la mía si es que deciden verla, algo que les recomiendo absolutamente. Al final del artículo les dejaré el trailer, como normalmente suelo hacer, pero igualmente les recomiendo que no lo vean, ya que cuanto menos sepan de ella mejor.
Estamos ante una de esas ocasiones en las que das gracias por amar tanto este arte, una de esas que vuelven a demostrar que no es necesario un presupuesto desorbitado si tienes algo grande que contar y sabes como hacerlo, porque el como hacerlo en este tipo de trabajos es lo que lo colocan a este lado de la delgada linea que lo separa de esas películas mediocres que ponen por pares las tardes de los fines de semana en televisión. Ese es para mi el principal acierto de este magnífico producto, dejar a su historia y sus dos protagonistas la importancia que tienen, sin adulterarlas en ningún momento, sin emplear sofisticados medios ni salirse en ningún momento de su enorme sobriedad, para no desviar un solo instante la atención de donde debe permanecer, de sus verdaderos protagonistas.
Al borde del peligro - Otto Preminger (1950)
Título original - Where the Sidewalk Ends
Año - 1950
Duración - 95 min.
País - Estados Unidos
Director - Otto Preminger
Guión - Ben Hecht, basado en la novela Night Cry de William L. Stuart
Música - Cyril J. Mockridge
Fotografía - Joseph LaShelle
Montaje - Louis R. Loeffler
Producción - Otto Preminger
Productora - 20th Century Fox
Género - Cine negro, Intriga
Reparto - Dana Andrews, Gene Tierney, Gary Merrill, Bert Freed, Tom Tully, Karl Malden, Ruth Donnelly, Craig Stevens
Seis años después de regalarnos la maravillosa Laura (1944), el bueno de Otto Preminger repitió con la pareja protagonista formada por Gene Tierney y Dana Andrews que tan buenos resultados le dio, para dejarnos una obra mucho menos conocida que la anterior, pero no por ello mucho peor. Con un guión en el que Ben Hecht adapta la novela Night Cry de William L. Stuart, la excelente fotografía de Joseph LaShelle y la dirección y producción de Preminger, estamos ante otra maravillosa oportunidad de disfrutar de todo el talento que este genio poseía. No, no es Laura, pero dejar de verla por ello es poco menos que un pecado. CINE, con mayúsculas.
Sinopsis: Marx Dixon (Dana Andrews) es un conflictivo policía marcado por el turbulento pasado de su padre, que lo hace tener problemas en la comisaría por su fama de ejercer su oficio con excesiva violencia. Por ello, cuando en el transcurso de una investigación mata accidentalmente al sospechoso que pretende interrogar, decide ocultar el crimen. Pero tras ser acusado injustamente de él un taxista llamado Jiggs Taylor (Tom Tully), Marx conoce a su bella hija Morgan (Gene Tierney), de la que se enamora inmediatamente.
El director: Otto Preminger fue un director de cine estadounidense de origen judeo-austríaco nacido en Wiznitz, el 5 de diciembre de 1905. Considerado como uno de los primeros directores que quebrantaron la censura en los Estados Unidos, debutó con The Great Love (1931), tras la que nos dejó una magnífica filmografía con casi 40 títulos, de los que mencionaré varios: Laura (1944), La Zarina (1945), ¿Ángel o diablo? (1945), Ambiciosa (1947), Entre el amor y el pecado (1947), El abanico de Lady Windermere (1949), Vorágine (1949), Cartas envenenadas (1951), Cara de ángel (1952), La luna es azul (1953), Carmen Jones (1954), Río sin retorno (1954), El hombre del brazo de oro (1955), Buenos días, tristeza (1958), Porgy y Bess (1959), Anatomía de un asesinato (1959), Éxodo (1960), Tempestad sobre Washington (1962), El cardenal (1963), Primera victoria (1965) o El rapto de Bunny Lake (1965), aunque la mayoría de las que me he dejado en el tintero merecen un visionado.
La película: Al borde del peligro o Where the Sidewalk Ends (su título original) es una de esas maravillosas sorpresas que esconde la amplia filmografía de Otto Preminger, bastante desconocida para el público en general en comparación con otras obras del estadounidense como Laura (1944), Cara de ángel (1952) o Río sin retorno (1954), pero no por ello menos disfrutable. Como en ella el director repite con la pareja Gene Tierney y Dana Andrews, las comparaciones son odiosas pero difícilmente evitables, por lo que lo haré por primera y única vez en el artículo: Al borde del peligro está un escalón por debajo de Laura, no les voy a engañar, pero para que se imaginen lo pequeño que es ese escalón, solo decirles que esta lleva un 8 de nota, mientras que Laura llevaba un 9.
Estamos ante un trabajo muy completo, una historia sobre una constante huida de su personaje principal, terriblemente marcado por la huella que en el dejó su padre, huella que lucha por borrar sin éxito en el desempeño de su trabajo. El guión escrito por Ben Hecht, que adapta la novela Night Cry de William L. Stuart, aunque con alguna pequeña laguna casi inapreciable, tiene todo lo necesario para enganchar al espectador desde un primer momento: un ritmo excelente, unos personajes perfectamente definidos y grandes dosis de intriga, algo nada sencillo de conseguir cuando desde la misma lectura de la sinopsis ya sabemos quien es el culpable del desafortunado crimen.
Año - 1950
Duración - 95 min.
País - Estados Unidos
Director - Otto Preminger
Guión - Ben Hecht, basado en la novela Night Cry de William L. Stuart
Música - Cyril J. Mockridge
Fotografía - Joseph LaShelle
Montaje - Louis R. Loeffler
Producción - Otto Preminger
Productora - 20th Century Fox
Género - Cine negro, Intriga
Reparto - Dana Andrews, Gene Tierney, Gary Merrill, Bert Freed, Tom Tully, Karl Malden, Ruth Donnelly, Craig Stevens
Seis años después de regalarnos la maravillosa Laura (1944), el bueno de Otto Preminger repitió con la pareja protagonista formada por Gene Tierney y Dana Andrews que tan buenos resultados le dio, para dejarnos una obra mucho menos conocida que la anterior, pero no por ello mucho peor. Con un guión en el que Ben Hecht adapta la novela Night Cry de William L. Stuart, la excelente fotografía de Joseph LaShelle y la dirección y producción de Preminger, estamos ante otra maravillosa oportunidad de disfrutar de todo el talento que este genio poseía. No, no es Laura, pero dejar de verla por ello es poco menos que un pecado. CINE, con mayúsculas.
Sinopsis: Marx Dixon (Dana Andrews) es un conflictivo policía marcado por el turbulento pasado de su padre, que lo hace tener problemas en la comisaría por su fama de ejercer su oficio con excesiva violencia. Por ello, cuando en el transcurso de una investigación mata accidentalmente al sospechoso que pretende interrogar, decide ocultar el crimen. Pero tras ser acusado injustamente de él un taxista llamado Jiggs Taylor (Tom Tully), Marx conoce a su bella hija Morgan (Gene Tierney), de la que se enamora inmediatamente.
El director: Otto Preminger fue un director de cine estadounidense de origen judeo-austríaco nacido en Wiznitz, el 5 de diciembre de 1905. Considerado como uno de los primeros directores que quebrantaron la censura en los Estados Unidos, debutó con The Great Love (1931), tras la que nos dejó una magnífica filmografía con casi 40 títulos, de los que mencionaré varios: Laura (1944), La Zarina (1945), ¿Ángel o diablo? (1945), Ambiciosa (1947), Entre el amor y el pecado (1947), El abanico de Lady Windermere (1949), Vorágine (1949), Cartas envenenadas (1951), Cara de ángel (1952), La luna es azul (1953), Carmen Jones (1954), Río sin retorno (1954), El hombre del brazo de oro (1955), Buenos días, tristeza (1958), Porgy y Bess (1959), Anatomía de un asesinato (1959), Éxodo (1960), Tempestad sobre Washington (1962), El cardenal (1963), Primera victoria (1965) o El rapto de Bunny Lake (1965), aunque la mayoría de las que me he dejado en el tintero merecen un visionado.
La película: Al borde del peligro o Where the Sidewalk Ends (su título original) es una de esas maravillosas sorpresas que esconde la amplia filmografía de Otto Preminger, bastante desconocida para el público en general en comparación con otras obras del estadounidense como Laura (1944), Cara de ángel (1952) o Río sin retorno (1954), pero no por ello menos disfrutable. Como en ella el director repite con la pareja Gene Tierney y Dana Andrews, las comparaciones son odiosas pero difícilmente evitables, por lo que lo haré por primera y única vez en el artículo: Al borde del peligro está un escalón por debajo de Laura, no les voy a engañar, pero para que se imaginen lo pequeño que es ese escalón, solo decirles que esta lleva un 8 de nota, mientras que Laura llevaba un 9.
Estamos ante un trabajo muy completo, una historia sobre una constante huida de su personaje principal, terriblemente marcado por la huella que en el dejó su padre, huella que lucha por borrar sin éxito en el desempeño de su trabajo. El guión escrito por Ben Hecht, que adapta la novela Night Cry de William L. Stuart, aunque con alguna pequeña laguna casi inapreciable, tiene todo lo necesario para enganchar al espectador desde un primer momento: un ritmo excelente, unos personajes perfectamente definidos y grandes dosis de intriga, algo nada sencillo de conseguir cuando desde la misma lectura de la sinopsis ya sabemos quien es el culpable del desafortunado crimen.
Sicario - Denis Villeneuve (2015)
Título original - Sicario
Año - 2015
Duración - 121 min.
País - Estados Unidos
Director - Denis Villeneuve
Guión - Taylor Sheridan
Música - Jóhann Jóhannsson
Fotografía - Roger Deakins
Montaje - Joe Walker
Producción - Basil Iwanyk, Molly Smith, Trent Luckinbill, Thad Luckinbill y Edward McDonnell
Productora - Lionsgate / Black Label Media
Género - Thriller, Acción, Drama
Reparto - Emily Blunt, Benicio Del Toro, Josh Brolin, Victor Garber, Jon Bernthal, Jeffrey Donovan, Daniel Kaluuya, Maximiliano Hernández, Dylan Kenin, Frank Powers, Bernardo P. Saracino, Edgar Arreola, Marty Lindsey, Julio Cedillo
El realizador canadiense Denis Villeneuve es el encargado de llevar a la gran pantalla el guión obra de Taylor Sheridan, en el que cambia totalmente de registro para mostrarnos una pequeña ventana al mundo del crimen organizado, las organizaciones que con el se lucran y la lucha de las autoridades por combatirlos. Con un magnífico reparto en el que sobresalen nombres como Emily Blunt, Benicio Del Toro o Josh Brolin, la excelente fotografía de Roger Deakins y la apropiada banda sonora de Jóhann Jóhannsson, estamos ante un denso thriller, regado con varias escenas de acción y filmado con la maestría marca de la casa.
Sinopsis: En la zona fronteriza que se extiende entre Estados Unidos y México la joven Kate Macer (Emily Blunt), una idealista agente del FBI, es reclutada por una fuerza de élite del Gobierno para luchar contra el narcotráfico. Bajo el mando de Matt Graver (Josh Brolin), un frío miembro de las fuerzas gubernamentales, y de Alejandro (Benicio del Toro), un enigmático asesor, el equipo emprende una misión que lleva a la mujer a cuestionarse sus convicciones sobre la guerra contra los narcos y los límites de la ley.
El director: Denis Villeneuve nació en Trois-Rivières, Quebec, en 1967 y estudió cine en la Universidad de Quebec en Montreal. En su filmografía encontramos trabajos muy dispares que van desde el documental REW-FFWD (1994), la comedia dramática Cosmos (1996), el drama romántico 32nd Day of August on Earth (1998), el drama Maelström (2000), la espeluznante Polytechnique (2009), el thriller Incendies (2010), del que ya os hablamos aquí. Tras ellos dio el salto a Hollywood y realizó dos nuevas maravillas, ambas de 2013: Prisioneros, cuya reseña podéis ver en este enlace y Enemy, con la que podéis hacer lo propio desde este enlace. Sicario supone un nuevo cambio de registro, algo que no impide que derroche la misma calidad a la que ya nos tiene acostumbrados.
La película: Realizar cine con el narcotráfico, los carteles y las agencias gubernamentales que luchan contra ellos como protagonistas no es una tarea fácil, en primer lugar porque existen multitud de trabajos sobre el tema, por lo que resultar original es una misión realmente complicada, además de ser una cuestión que puede resultar un tanto espesa si no es tratada con el debido tacto. Denis Villeneuve ha conseguido realizar una obra muy completa sobre este mundo, utilizando la enorme capacidad que tiene para mostrarnos con enorme impacto visual su historia, pero sin dejar de lado el desarrollo de esta y de sus personajes. Un thriller denso, donde destaca la asfixiante atmósfera que rodea en todo momento al espectador y las escasas pero brillantes escenas de acción que lo enriquecen.
Su principal problema, que para mi no lo fue, ya que conozco perfectamente el tipo de cine que hace el canadiense, es el de muchas producciones de hoy día, que su promoción parece prometer un trabajo bien distinto al que al final llega al espectador, que si se deja llevar por ella puede resultar algo defraudado. Sicario no es una película de acción al uso, aunque si que tiene varias escenas del género magistralmente rodadas que invitan a pensar en ello, por lo que si buscamos lo que no es, puede resultarnos un tanto insulsa. Lo que si tenemos delante es un thriller perfectamente filmado, en el que nada queda a la improvisación y en el que todos y cada uno de sus detalles trabajan para que el espectador forme parte de la historia, la sufra y la sienta de la forma mas real posible.
Año - 2015
Duración - 121 min.
País - Estados Unidos
Director - Denis Villeneuve
Guión - Taylor Sheridan
Música - Jóhann Jóhannsson
Fotografía - Roger Deakins
Montaje - Joe Walker
Producción - Basil Iwanyk, Molly Smith, Trent Luckinbill, Thad Luckinbill y Edward McDonnell
Productora - Lionsgate / Black Label Media
Género - Thriller, Acción, Drama
Reparto - Emily Blunt, Benicio Del Toro, Josh Brolin, Victor Garber, Jon Bernthal, Jeffrey Donovan, Daniel Kaluuya, Maximiliano Hernández, Dylan Kenin, Frank Powers, Bernardo P. Saracino, Edgar Arreola, Marty Lindsey, Julio Cedillo
El realizador canadiense Denis Villeneuve es el encargado de llevar a la gran pantalla el guión obra de Taylor Sheridan, en el que cambia totalmente de registro para mostrarnos una pequeña ventana al mundo del crimen organizado, las organizaciones que con el se lucran y la lucha de las autoridades por combatirlos. Con un magnífico reparto en el que sobresalen nombres como Emily Blunt, Benicio Del Toro o Josh Brolin, la excelente fotografía de Roger Deakins y la apropiada banda sonora de Jóhann Jóhannsson, estamos ante un denso thriller, regado con varias escenas de acción y filmado con la maestría marca de la casa.
Sinopsis: En la zona fronteriza que se extiende entre Estados Unidos y México la joven Kate Macer (Emily Blunt), una idealista agente del FBI, es reclutada por una fuerza de élite del Gobierno para luchar contra el narcotráfico. Bajo el mando de Matt Graver (Josh Brolin), un frío miembro de las fuerzas gubernamentales, y de Alejandro (Benicio del Toro), un enigmático asesor, el equipo emprende una misión que lleva a la mujer a cuestionarse sus convicciones sobre la guerra contra los narcos y los límites de la ley.
El director: Denis Villeneuve nació en Trois-Rivières, Quebec, en 1967 y estudió cine en la Universidad de Quebec en Montreal. En su filmografía encontramos trabajos muy dispares que van desde el documental REW-FFWD (1994), la comedia dramática Cosmos (1996), el drama romántico 32nd Day of August on Earth (1998), el drama Maelström (2000), la espeluznante Polytechnique (2009), el thriller Incendies (2010), del que ya os hablamos aquí. Tras ellos dio el salto a Hollywood y realizó dos nuevas maravillas, ambas de 2013: Prisioneros, cuya reseña podéis ver en este enlace y Enemy, con la que podéis hacer lo propio desde este enlace. Sicario supone un nuevo cambio de registro, algo que no impide que derroche la misma calidad a la que ya nos tiene acostumbrados.
La película: Realizar cine con el narcotráfico, los carteles y las agencias gubernamentales que luchan contra ellos como protagonistas no es una tarea fácil, en primer lugar porque existen multitud de trabajos sobre el tema, por lo que resultar original es una misión realmente complicada, además de ser una cuestión que puede resultar un tanto espesa si no es tratada con el debido tacto. Denis Villeneuve ha conseguido realizar una obra muy completa sobre este mundo, utilizando la enorme capacidad que tiene para mostrarnos con enorme impacto visual su historia, pero sin dejar de lado el desarrollo de esta y de sus personajes. Un thriller denso, donde destaca la asfixiante atmósfera que rodea en todo momento al espectador y las escasas pero brillantes escenas de acción que lo enriquecen.
Su principal problema, que para mi no lo fue, ya que conozco perfectamente el tipo de cine que hace el canadiense, es el de muchas producciones de hoy día, que su promoción parece prometer un trabajo bien distinto al que al final llega al espectador, que si se deja llevar por ella puede resultar algo defraudado. Sicario no es una película de acción al uso, aunque si que tiene varias escenas del género magistralmente rodadas que invitan a pensar en ello, por lo que si buscamos lo que no es, puede resultarnos un tanto insulsa. Lo que si tenemos delante es un thriller perfectamente filmado, en el que nada queda a la improvisación y en el que todos y cada uno de sus detalles trabajan para que el espectador forme parte de la historia, la sufra y la sienta de la forma mas real posible.
Sherlock: La novia abominable - Douglas Mackinnon (2016)
Título original - Sherlock: The Abominable Bride
Año - 2016
Duración - 90 min.
País - Reino Unido
Director - Douglas Mackinnon
Guión - Steven Moffat y Mark Gatiss
Música - David Arnold y Michael Price
Fotografía - Suzie Lavelle
Montaje - Andrew McClelland
Producción - Sue Vertue
Productora - British Broadcasting Corporation (BBC) / Hartswood Films
Género - Intriga
Reparto - Benedict Cumberbatch, Martin Freeman, Amanda Abbington, Mark Gatiss, Catherine McCormack, Rupert Graves, Tim McInnerny, Una Stubbs, Louise Brealey, Natasha O’Keeffe, David Nellist, Jonathan Aris, Gerald Kyd, Yasmine Akram
El regalo que la BBC y Hartswood Films hicieron a los seguidores de la magnífica Sherlock para conmemorar el comienzo del año, hace que bien haya merecido la pena la espera. Con un vibrante guión de Steven Moffat y Mark Gatiss, la dirección de Douglas Mackinnon, y el protagonismo de Cumberbatch y Freeman, estamos ante hora y media que supone todo un homenaje a los personajes creados por Sir Arthur Conan Doyle, con innumerables referencias a muchas de sus novelas y a la propia serie. Una curiosa y divertida nueva vuelta de tuerca que merece la pena disfrutar.
Sinopsis: Londres, 1895. ¿Por qué Thomas Ricoletti (Gerald Kyd) está un poco sorprendido de ver a su esposa Emilia (Natasha O'Keeffe) vestida con su antiguo traje de novia? Será por que solamente unas horas antes se había quitado la vida... El fantasma de la Señora Ricoletti parece que ahora está rondando por las calles con una insaciable sed de venganza. Holmes (Benedict Cumberbatch) y Watson (Martin Freeman) deben usar toda su astucia para combatir a un enemigo que parece llegado del más allá… ¡La novia abominable!
La película: Dos largos años hacía ya que nuestros remozados amigos nos dejaban la última de sus aventuras en una serie que consiguió encandilar a multitud de aficionados, trasladando a la actualidad las desventuras del mas famoso de los detectives privados y su sufrido compañero. El curioso formato en la que esta nos llegó, la calidad y su enorme capacidad de enganchar a los espectadores, hacen que para muchos este viaje fuera demasiado corto, por lo que esperaban este especial navideño como agua de mayo. El resultado creo que defraudará a muy pocos de ellos, porque además de conservar las principales señas de identidad que hicieron de la serie todo un fenómeno, en esta ocasión la acción se traslada a la época original en la que transcurrían las novelas originales, algo que es tan solo el comienzo de lo que acaba por ser un sentido homenaje a los personajes creados por Doyle.
En el destaca el excelente guión escrito por Steven Moffat y Mark Gatiss, cuyo frenético y casi constante ritmo deja poco tiempo para el aburrimiento, atrapando al espectador desde un principio para ya no soltarlo durante toda su duración. Hay que señalar que, aunque en un principio parece una historia que para ser disfrutada no necesita de haber visto la serie con anterioridad, la verdad es que llega un momento en el que si no lo has hecho acabarás perdiéndote. Esto es debido a la infinidad de referencias que en ella se hacen a las novelas clásicas del famoso detective, aunque en su tramo final si que resulta fundamental conocer la serie para entender plenamente la resolución del caso.
Año - 2016
Duración - 90 min.
País - Reino Unido
Director - Douglas Mackinnon
Guión - Steven Moffat y Mark Gatiss
Música - David Arnold y Michael Price
Fotografía - Suzie Lavelle
Montaje - Andrew McClelland
Producción - Sue Vertue
Productora - British Broadcasting Corporation (BBC) / Hartswood Films
Género - Intriga
Reparto - Benedict Cumberbatch, Martin Freeman, Amanda Abbington, Mark Gatiss, Catherine McCormack, Rupert Graves, Tim McInnerny, Una Stubbs, Louise Brealey, Natasha O’Keeffe, David Nellist, Jonathan Aris, Gerald Kyd, Yasmine Akram
El regalo que la BBC y Hartswood Films hicieron a los seguidores de la magnífica Sherlock para conmemorar el comienzo del año, hace que bien haya merecido la pena la espera. Con un vibrante guión de Steven Moffat y Mark Gatiss, la dirección de Douglas Mackinnon, y el protagonismo de Cumberbatch y Freeman, estamos ante hora y media que supone todo un homenaje a los personajes creados por Sir Arthur Conan Doyle, con innumerables referencias a muchas de sus novelas y a la propia serie. Una curiosa y divertida nueva vuelta de tuerca que merece la pena disfrutar.
Sinopsis: Londres, 1895. ¿Por qué Thomas Ricoletti (Gerald Kyd) está un poco sorprendido de ver a su esposa Emilia (Natasha O'Keeffe) vestida con su antiguo traje de novia? Será por que solamente unas horas antes se había quitado la vida... El fantasma de la Señora Ricoletti parece que ahora está rondando por las calles con una insaciable sed de venganza. Holmes (Benedict Cumberbatch) y Watson (Martin Freeman) deben usar toda su astucia para combatir a un enemigo que parece llegado del más allá… ¡La novia abominable!
La película: Dos largos años hacía ya que nuestros remozados amigos nos dejaban la última de sus aventuras en una serie que consiguió encandilar a multitud de aficionados, trasladando a la actualidad las desventuras del mas famoso de los detectives privados y su sufrido compañero. El curioso formato en la que esta nos llegó, la calidad y su enorme capacidad de enganchar a los espectadores, hacen que para muchos este viaje fuera demasiado corto, por lo que esperaban este especial navideño como agua de mayo. El resultado creo que defraudará a muy pocos de ellos, porque además de conservar las principales señas de identidad que hicieron de la serie todo un fenómeno, en esta ocasión la acción se traslada a la época original en la que transcurrían las novelas originales, algo que es tan solo el comienzo de lo que acaba por ser un sentido homenaje a los personajes creados por Doyle.
En el destaca el excelente guión escrito por Steven Moffat y Mark Gatiss, cuyo frenético y casi constante ritmo deja poco tiempo para el aburrimiento, atrapando al espectador desde un principio para ya no soltarlo durante toda su duración. Hay que señalar que, aunque en un principio parece una historia que para ser disfrutada no necesita de haber visto la serie con anterioridad, la verdad es que llega un momento en el que si no lo has hecho acabarás perdiéndote. Esto es debido a la infinidad de referencias que en ella se hacen a las novelas clásicas del famoso detective, aunque en su tramo final si que resulta fundamental conocer la serie para entender plenamente la resolución del caso.
Rasputín - Uli Edel (1996)
Título original - Rasputin
Año - 1996
Duración - 135 min.
País - Estados Unidos
Director - Uli Edel
Guión - Peter Pruce
Música - Brad Fiedel
Fotografía - Elemér Ragályi
Montaje - Seth Flaum y Dan Rae
Producción - David Kirkpatrick
Productora - Home Box Office (HBO) / Rysher-Citadel Entertainment
Género - Drama
Reparto - Alan Rickman, Greta Scacchi, Ian McKellen, David Warner, John Wood, James Frain, Ian Hogg, Sheila Ruskin, Peter Jeffrey, Freddie Findlay, László Aron
Uli Edel fue el director encargado de llevar a la pequeña pantalla el guión escrito por Peter Pruce, en el que nos cuenta la historia del celebre Rasputín, un monje de dudosa moral que tuvo una estrecha relación con los zares rusos antes de su caída. Una excelente opción para disfrutar del excelente trabajo del tristemente fallecido Alan Rickman, con el buen hacer que la HBO suele lucir en sus trabajos. Una forma de conocer una pequeña parte de la historia del imperio ruso amena y muy trabajada.
Sinopsis: Rusia, finales del siglo XIX. El estado de salud del Zarévich Alexis (Freddie Finlay), heredero directo del trono, preocupa y mucho a los zares Nicolás (Ian McKellen) y Alejandra (Greta Scacchi), que temen por la continuidad de la dinastía de los Romanov, tras más de tres siglos en el poder. Tras la llegada a San Petersburgo de un extraño monje llamado Grigori Rasputín (Alan Rickman), que asegura haber recibido la visita de la Virgen, algo de lo que consigue convencer a los altos cargos de la iglesia, este es llamado a palacio para que de su bendición al pequeño heredero, comenzando una relación con los zares que acabará por agotar la paciencia de un pueblo que se muere de hambre.
El director: Uli Edel es un director de cine alemán nacido en Neuenburg am Rhein, South Baden, el 11 de abril de 1947. Su carrera se ha dividido entre el cine y la televisión, siendo en esta última donde mas se ha prodigado. En la gran pantalla debutó con Yo, Cristina F. (1981), tras la que dirigió Última salida, Brooklyn (1989) y El cuerpo del delito (1993), con Madonna y Willem Dafoe como protagonistas. Tras ella llegaron El pequeño vampiro (2000), R.A.F. Facción del Ejército Rojo (2008), Time You Change (2010) y Pay the Ghost (2015). En televisión ha participado en varios proyectos, entre los que destacaremos varios: Tyson (1995), Camino al infierno (1999), Las brumas de Avalon (2001), Julio César (2002) o Houdini (2014).
La película: A la hora de elegir un trabajo para homenajear al recientemente fallecido Alan Rickman, las opciones eran varias, pero he decidido hacerlo con este telefilm de HBO que no tiene la fama de muchos de sus trabajos en cine, pero que es una excelente forma de acercarnos a parte de la historia de la Rusia de los zares, de una forma amena y bastante fiel a la realidad. El bueno de Rickman realiza aquí una interpretación magnífica del famoso monje, que consigue incluso hacer palidecer al resto del notable reparto, siendo el vehículo conductor para mostrarnos el final de la dinastía Romanov, que dominó el imperio ruso durante mas de tres siglos. Historia y entretenimiento, una combinación mas que recomendable.
El personaje de Rasputín ya fue interpretado en varias ocasiones, entre las que destacan la que realizara Christopher Lee en Rasputín (1966), con guión de Anthony Hinds y la dirección de Don Sharp, y la de Tom Baker en Nicolás y Alejandra (1971), con guión de James Goldman y Edward Bond, dirigida por Franklin J. Schaffner, aunque en esta última son los zares los auténticos protagonistas de la película. En esta ocasión se trata de dar el principal protagonismo al oscuro monje, un personaje mas preocupado por tener la barriga llena de deliciosos licores y la cama de lujuriosas mujeres, que de realizar el encargo que, según el mismo, había recibido de la Santa Madre, durante un largo peregrinar que realizó a pie.
Año - 1996
Duración - 135 min.
País - Estados Unidos
Director - Uli Edel
Guión - Peter Pruce
Música - Brad Fiedel
Fotografía - Elemér Ragályi
Montaje - Seth Flaum y Dan Rae
Producción - David Kirkpatrick
Productora - Home Box Office (HBO) / Rysher-Citadel Entertainment
Género - Drama
Reparto - Alan Rickman, Greta Scacchi, Ian McKellen, David Warner, John Wood, James Frain, Ian Hogg, Sheila Ruskin, Peter Jeffrey, Freddie Findlay, László Aron
Uli Edel fue el director encargado de llevar a la pequeña pantalla el guión escrito por Peter Pruce, en el que nos cuenta la historia del celebre Rasputín, un monje de dudosa moral que tuvo una estrecha relación con los zares rusos antes de su caída. Una excelente opción para disfrutar del excelente trabajo del tristemente fallecido Alan Rickman, con el buen hacer que la HBO suele lucir en sus trabajos. Una forma de conocer una pequeña parte de la historia del imperio ruso amena y muy trabajada.
Sinopsis: Rusia, finales del siglo XIX. El estado de salud del Zarévich Alexis (Freddie Finlay), heredero directo del trono, preocupa y mucho a los zares Nicolás (Ian McKellen) y Alejandra (Greta Scacchi), que temen por la continuidad de la dinastía de los Romanov, tras más de tres siglos en el poder. Tras la llegada a San Petersburgo de un extraño monje llamado Grigori Rasputín (Alan Rickman), que asegura haber recibido la visita de la Virgen, algo de lo que consigue convencer a los altos cargos de la iglesia, este es llamado a palacio para que de su bendición al pequeño heredero, comenzando una relación con los zares que acabará por agotar la paciencia de un pueblo que se muere de hambre.
El director: Uli Edel es un director de cine alemán nacido en Neuenburg am Rhein, South Baden, el 11 de abril de 1947. Su carrera se ha dividido entre el cine y la televisión, siendo en esta última donde mas se ha prodigado. En la gran pantalla debutó con Yo, Cristina F. (1981), tras la que dirigió Última salida, Brooklyn (1989) y El cuerpo del delito (1993), con Madonna y Willem Dafoe como protagonistas. Tras ella llegaron El pequeño vampiro (2000), R.A.F. Facción del Ejército Rojo (2008), Time You Change (2010) y Pay the Ghost (2015). En televisión ha participado en varios proyectos, entre los que destacaremos varios: Tyson (1995), Camino al infierno (1999), Las brumas de Avalon (2001), Julio César (2002) o Houdini (2014).
La película: A la hora de elegir un trabajo para homenajear al recientemente fallecido Alan Rickman, las opciones eran varias, pero he decidido hacerlo con este telefilm de HBO que no tiene la fama de muchos de sus trabajos en cine, pero que es una excelente forma de acercarnos a parte de la historia de la Rusia de los zares, de una forma amena y bastante fiel a la realidad. El bueno de Rickman realiza aquí una interpretación magnífica del famoso monje, que consigue incluso hacer palidecer al resto del notable reparto, siendo el vehículo conductor para mostrarnos el final de la dinastía Romanov, que dominó el imperio ruso durante mas de tres siglos. Historia y entretenimiento, una combinación mas que recomendable.
El personaje de Rasputín ya fue interpretado en varias ocasiones, entre las que destacan la que realizara Christopher Lee en Rasputín (1966), con guión de Anthony Hinds y la dirección de Don Sharp, y la de Tom Baker en Nicolás y Alejandra (1971), con guión de James Goldman y Edward Bond, dirigida por Franklin J. Schaffner, aunque en esta última son los zares los auténticos protagonistas de la película. En esta ocasión se trata de dar el principal protagonismo al oscuro monje, un personaje mas preocupado por tener la barriga llena de deliciosos licores y la cama de lujuriosas mujeres, que de realizar el encargo que, según el mismo, había recibido de la Santa Madre, durante un largo peregrinar que realizó a pie.