
Año - 2014
Duración - 135 min.
País - Francia
Director - Cédric Jimenez
Guión - Cédric Jimenez y Audrey Diwan
Música - Guillaume Roussel
Fotografía - Laurent Tangy
Montaje - Sophie Reine
Producción - Alain Goldman
Productora - Gaumont
Género - Thriller, Drama
Reparto - Jean Dujardin, Gilles Lellouche, Céline Sallette, Benoît Magimel, Guillaume Gouix, Bruno Todeschini, Féodor Atkine, Moussa Maaskri, Pauline Burlet, Eric Godon, Mélanie Doutey, Xavier Alcan, John Flanders
Sinopsis: La ciudad de Marsella es el punto clave del tráfico de drogas de comienzos de los años 70. Tany Zampa (Gilles Lellouche) es el líder de una organización conocida como La French, que se dedica a importar morfina procedente de Turquía, convertirla en heroína e introducir esta en los Estados Unidos. Tras el asesinato de su predecesor, el juez de menores Pierre Michel (Jean Dujardin) es trasladado a la unidad que lucha contra el crimen organizado, pero rápidamente descubre que acabar con la colosal organización no será nada fácil, por lo que no tiene mas remedio que cambiar sus métodos por otros que no siempre están dentro de la legalidad.

La película: En la historia del cine reciente solemos ver asociados los títulos que tienen al crimen organizado como principal protagonista con trepidantes persecuciones, espectaculares tiroteos, macabros y explícitos asesinatos y mucha, mucha acción. El trabajo que hoy nos ocupa se desmarca en todo momento de esta tendencia, algo que puede que a algunos espectadores no les haga mucha gracia, pero que viendo el resultado final conseguido no debería ser motivo suficiente para dejar de disfrutarla. De hecho, la violencia que en ella se muestra es lo menos explícita que podría haber sido, tratándose como se trata de una historia de mafiosos.
A cambio, el realizador Cédric Jimenez decide mostrarnos la vida personal y laboral de los dos máximos exponentes de dos mundos opuestos, que aunque no sean conscientes de ello, tienen mucho en común, el de Tany Zampa, el criminal de sangre helada que lucha por mantener su dominio en la organización criminal y el de Pierre Michel, el obstinado juez dispuesto a casi todo con el fin de acabar con la impunidad con la que La French gobierna la zona a su antojo. Con esto no quiero decir, algo que me gustaría que quedase muy claro, que estemos ante un trabajo pesado o anodino de ver, ya que por el contrario es realmente adictivo y ameno, pero si quiero que tengan claro que es lo que The Connection les puede y no ofrecer.