
Año - 2013
Duración - 98 min.
País - Estados Unidos
Director - Park Chan-wook
Guión - Wentworth Miller
Música - Clint Mansell
Fotografía - Chung-hoon Chung
Productora - Fox Searchlight Pictures / Scott Free Productions
Género - Intriga. Thriller
Reparto - Mia Wasikowska, Matthew Goode, Nicole Kidman, Jacki Weaver, Dermot Mulroney, Lucas Till, Ralph Brown, Alden Ehrenreich, Phyllis Somerville, Wendy Keeling, Lauren E. Roman, Tyler von Tagen, Judith Godrèche
Web oficial - http://www.foxsearchlight.com/stoker/
Stoker es el nombre del nuevo universo creado por Park Chan-wook. Tan extraño y absorbente como llamativo y único, señas marca de la casa que garantizan poder observar una historia como mas nadie os la contaría. No es un plato para todos los paladares pero si uno que solo podréis probar aquí. ¿Os atrevéis?
Al cumplir dieciocho años, la vida de India Stoker (Mia Wasikowska) da un giro inesperado cuando su padre, Richard (Dermot Mulroney), fallece en un accidente automovilístico, por lo que India convivirá con su emocionalmente inestable madre Evelyn (Nicole Kidman). En el funeral, ambas conocen al carismático y encantador hermano de Richard, Charlie (Matthew Goode), quien ha pasado toda su vida viajando por el mundo, tras lo que él les anuncia su intención de quedarse una temporada con ellas para apoyarlas, algo que no se tomarán las dos de la misma forma.

'Stoker' es su primera película rodada en habla inglesa y continúa con su peculiar estilo tras la cámara, inconfundible si ya has visualizado parte de su obra. La película se rodó durante cuarenta días en Nashville (Tennessee), en localizaciones cerca de Murfreesboro, y en la Universidad del Sur, en Sewanee. Se estrenó en enero de 2013 en el Festival de Sundance obteniendo buenas críticas en general.
Una de las características que llaman rápidamente la atención es el mimo con el que el realizador trata a la imagen, en muchas ocasiones anteponiéndola a cualquier otro aspecto de su trabajo. Es por ello por lo que en esta ocasión se cambia parte de la intriga que da la acción propia del género por la creación de un ambiente enrarecido que nos transporta a un paisaje propio de un cuento gótico, haciendo que la narración transcurra de una forma pausada y artística. Nada nuevo en el director coreano, que tiene en ello una de sus inconfundibles señas de identidad.