
Año - 2015
Duración - 118 min.
País - Australia
Director - Jocelyn Moorhouse
Guión - Jocelyn Moorhouse, basado en la novela homónima de Rosalie Ham
Música - David Hirschfelder
Fotografía - Donald McAlpine
Montaje - Jill Bilcock
Producción - Sue Maslin
Productora - Film Art Media / Screen Australia
Género - Drama, Comedia
Reparto - Kate Winslet, Judy Davis, Liam Hemsworth, Hugo Weaving, Sarah Snook, Sacha Horler, Caroline Goodall, James Mackay, Kerry Fox, Alison Whyte, Barry Otto, Julia Blake, Rebecca Gibney, Shane Jacobson, Genevieve Lemon, Shane Black, Shane Bourne, Hayley Magnus
Jocelyn Moorhouse adapta la novela The Dressmaker, escrita por Rosalie Ham, y dirige este curioso trabajo en el que mezcla sin ningún pudor comedia y drama, además de otro puñado de subgéneros inimaginables, de forma un tanto drástica, dando lugar a un trabajo sumamente original, aunque difícilmente digerible por buena parte del público. Una obra en la que se respira por momentos aromas a cine memorable, que se apoya en el indiscutible carisma y el buen hacer de Kate Winslet, pero que acaba quedándose en recomendable, sin llegar a ser un trabajo redondo por diversos detalles.
Sinopsis: Australia, años 50. Tilly Dunnage (Kate Winslet), una glamurosa modista, regresa a su casa en el turbio pueblo de Dungatar tras muchos años trabajando en exclusivas casas de moda de París, con el objetivo de cerrar heridas del pasado y vengarse de quienes la forzaron a marcharse años atrás. Allí intentará reconciliarse con Molly (Judy Davis) y armada únicamente con su máquina de coser y su excepcional estilo, intentará transformar a las mujeres del pueblo y lograr de esta peculiar forma su dulce y ansiada venganza.

La película: He de comenzar aclarando que La modista (The Dressmaker) es un trabajo que ha dejado en mi sensaciones un tanto dispares, no porque no sea una película aconsejable, que para mi lo es, ni porque no posea casi todo lo necesario para llegar a ser redonda, sino porque su intento de innovar en cuanto a la grotesca mezcla de géneros que en ella se da, no tiene el resultado que su realizadora esperaba, al menos no lo ha tenido en mi, consiguiendo incluso restar mas que sumar en algunos momentos. Es un trabajo ameno de ver, divertido en muchos momentos, e incluso brillante diría yo, pero cuando la historia exige un cambio de tono, este resulta excesivamente brusco, algo que no gustará a todos por igual, sobre todo teniendo en cuenta que no hablamos de un solo momento, sino de varios a lo largo de la historia.
Un vaivén de emociones realmente difícil de explicar, que asaltan constantemente a un espectador que nunca sabe que será lo próximo que le puede esperar, tan original y poco convencional para algunos como brusca e incluso mareante para otros. Destacan en ella muchos de sus personajes, totalmente caricaturizados y en algunos casos difíciles de olvidar, en los que se basa gran parte del encanto de la película. Y todo ello para contarnos algo mil veces contado ya, una historia de venganza disfrazada de mil y una formas, pero que inevitablemente acaba desprendiéndose de todas ellas y mostrando su verdadera identidad, eso si, sin dejar de lado en ningún momento un humor que pasa del mas convencional al mas negro que puedan imaginar.