
Spartacus: Sangre y Arena nos contaba la vida del famoso gladiador rebelde Espartaco. La serie destaca por su gran violencia gráfica, contenido sexual y lenguaje explícito. El guión y las interpretaciones son excelentes y las espectaculares batallas se intercalaban perfectamente con las tramas propias de la época, consiguiendo un producto que jamas resultaba aburrido ni repetitivo.
Sin embargo, con la segunda temporada ya anunciada, a su excelente protagonista, Andy Whitfield, le fue diagnosticado un linfoma que finalmente acabó con su vida. Antes consiguió rodar una pre-cuela en forma de miniserie llamada 'Espartaco: Dioses de la Arena'', que consta de seis episodios.
En mi opinión, a partir de la segunda temporada, titulada 'Spartacus: Vengeance' y protagonizada por Liam McIntyre, la serie perdió gran parte de su esencia, derivando en un producto de mucha menor calidad, hasta tal punto que no llegué a acabar de verla. Una verdadera lastima que aun me tiene mosca, ya que la primera temporada es excelente.
Prison Break

La primera temporada de esta serie es sencillamente genial. Nos cuenta la historia de un arquitecto de Illinois que se introduce en la prisión de Fox River para sacar a su hermano, injustamente condenado a pena de muerte, a través de un elaborado plan de fuga. Su ritmo es trepidante, los personajes inolvidables y muy carismáticos, los capítulos perfectamente rodados y enlazados entre si... Una maravilla de serie.
Tras finalizar la primera temporada con la fuga de nuestros protagonistas, el público se preguntaba que derroteros cogería la serie. La verdad es que sus creadores consiguieron mantener la expectación, bajando algo su calidad pero continuando en la brecha, aunque con 15 o 16 episodios hubiera bastado para cerrarla brillantemente.
Pero como había que estirar las ganancias acabaron realizando una tercera temporada en la que decidieron arreglar las cosas metiendo a varios personajes de nuevo en prisión. Nada sería ya ni parecido a su excelente comienzo. De la cuarta temporada ya ni os comento, ¿para que?, es mas de lo mismo.