Año - 1975
Duración - 117 min.
País - Estados Unidos
Director - Sydney Pollack
Guión - Lorenzo Semple Jr., David Rayfiel (Novela: James Grady)
Música - Dave Grusin
Fotografía - Owen Roizman
Montaje - Don Guidice y Fredric Steinkamp
Producción - Dino De Laurentiis
Productora - Paramount Pictures
Género - Intriga, Espionaje
Reparto - Robert Redford, Faye Dunaway, Cliff Robertson, Max von Sydow, John Houseman, Addison Powell, Tina Chen, Walter McGinn
Robert Redford, en su tercer trabajo consecutivo junto a Sydney Pollack (Las aventuras de Jeremiah Johnson, Tal como éramos), protagoniza esta singular película con un guión de Lorenzo Semple Jr. y David Rayfiel, que adaptan de la novela Six Days of the Condor, de James Grady (se ve que con 3 días hubo mas que suficiente), producida por Dino De Laurentiis. Un trabajo donde la intriga tiene un papel fundamental, en una historia que ha envejecido regular y que toca de muy cerca a la CIA, por lo que no debió resultar fácil de realizar. Mención especial para los compañeros de reparto de Redford, Max Von Sydow, Cliff Robertson y el toque femenino de Faye Dunaway.
Sinopsis: Joseph Turner (Robert Redford) es un empleado de la CIA que trabaja leyendo libros de todo tipo, con la finalidad de encontrar mensajes cifrados en ellos. Un buen día, tras creer encontrar algo interesante en uno de ellos y comunicárselo a sus superiores, encuentra a todos sus compañeros asesinados, por lo que inicia una huida con el único fin de salvar su vida e intentar descubrir el porqué de lo sucedido. Sin saber donde ir, obliga a Kathy Hale (Faye Dunaway), una mujer que aborda al entrar en su coche, a llevarlo a su casa, con el fin de poner en claro sus ideas y pensar como sobrevivir.
La película: Sydney Pollack es un director que, a pesar de habernos dejado un buen puñado de títulos para el recuerdo (La intérprete, Tal como éramos, Memorias de África, Tootsie), no está considerado como un gran director por una parte de la crítica y de los aficionados. En esta ocasión creo que consigue sacar petroleo de una historia un tanto irregular, que alterna momentos brillantes con otros un poco inverosímiles, pero que el director consigue elevar muy por encima de sus posibilidades iniciales, gracias a ese don que poseía para crear tensión y elevar la intriga a su máxima potencia.
El principal problema que yo le veo a Los tres días del cóndor es algo que por desgracia comparte con muchas películas de su misma época, lo mal que ha pasado el tiempo para ellas. Y es que los años 70 nos dejaron una estética en los personajes que canta a leguas de distancia, tanto en el vestuario como en los peinados, por no hablar de lo difícil que es para una persona joven, acostumbrado a todo tipo de tecnologías que han cambiado la vida por completo, de comprender los métodos utilizados durante la guerra fría. Como muestra un botón: un departamento completo de la CIA, una de las agencias de inteligencia mas famosas del planeta, dedicada a leer todo lo publicado en el mundo, en busca de mensajes entremezclados en el texto.
El guión fue escrito por Lorenzo Semple Jr. y David Rayfiel, adaptando la novela Six Days of the Condor de James Grady. Como grandes logros, decir que consigue mantener el interés en todo momento, utilizando un ritmo moderado pero eficaz, aunque gran parte de culpa de ello la tiene también el trabajo del realizador. Otra de sus virtudes son los diálogos, que aunque no siempre, si que nos deja momentos para el recuerdo, como las escenas entre Redford y Faye Dunaway o la magnífica escena final, entre Redford y Cliff Robertson, una de las mejores de toda la película.
