Título original - Frances
Año - 1982
Duración - 134 min.
País - Estados Unidos
Director - Graeme Clifford
Guión - Nicholas Kazan, Eric Bergren y Christopher De Vore
Música - John Barry
Fotografía - Laszlo Kovacs
Montaje - John Wright
Producción - Jonathan Sanger
Productora - Universal Pictures / Brooksfilms / EMI Films
Género - Drama
Reparto - Jessica Lange, Sam Shepard, Kim Stanley, Bart Burns, Jeffrey DeMunn, James Karen, Christopher Pennock, Kevin Costner, Anjelica Huston
Graeme Clifford fue el encargado de llevar a la gran pantalla el guión escrito por Nicholas Kazan, Eric Bergren y Christopher De Vore, en el que se nos cuenta gran parte de la vida de la desdichada actriz Frances Farmer. Un trabajo que merece la pena ser visto y refleja con incierta similitud a la realidad la vida de la artista, ya que sus creadores se toman alguna que otra licencia. En la película destaca el enorme dramatismo que desprende la historia y el magnífico trabajo de una Jessica Lange que borda su papel como "La chica mala de Seattle Oeste", por el que sería nominada a un Óscar.
Sinopsis: Frances Elena Farmer (Jessica Lange) es una adolescente rebelde con un enorme talento que vive en Seattle junto a sus padres. Tras ganar un viaje a la Unión Soviética por un controvertido ensayo llamado Dios Muere, su imagen en la comunidad deja mucho que desear, aunque esto no consigue hacerla desistir. Decidida a convertirse en actriz, se traslada a Hollywood donde rápidamente comienza a trabajar en la industria cinematográfica, pero su difícil carácter para la época en la que vivió y el poco interés que en ella despertaban los papeles para los que era elegida, la hacen mudarse a Nueva York para continuar haciendo teatro en el Group Theatre, de la mano del escritor Clifford Odets (Jeffrey DeMunn). Allí comenzará su progresivo declive, que acabará convirtiendo su vida en un auténtico calvario.
El director: Graeme Clifford es un director de cine australiano nacido en Sydney, Australia, en 1942. Después de trabajar varios años como editor, su carrera como director ha transcurrido principalmente en televisión, habiendo dirigido solo cuatro películas de cine: Burke & Wills (1985), con Jack Thompson y Nigel Havers como protagonistas, Al filo del abismo (1988), con nombres como Christian Slater, Steven Bauer o Richard Herd en su reparto y Ruby Cairo (1992), con la participación de Andie MacDowell, Liam Neeson y Viggo Mortensen, entre otros, además de la que hoy nos ocupa, su mejor película para mi. En televisión ha participado en multitud de series y telefilms como Los nuevos vengadores (1976), Cuentos de las estrellas (1982), El último Don I (1997) y II (1998), El último testigo (1999), Los Thornton (2003), El secreto del sótano (2004) o El guión de mi vida (2007), entre otras.
La película: La vida de la actriz Frances Farmer es una de las que mas páginas se han escrito en la historia del cine, ya que llama enormemente la atención como alguien que podía haberlo tenido todo pasó a tocar fondo de la noche a la mañana, algo que en la época fue noticia durante mucho tiempo y ocupó multitud de portadas. Con el paso del tiempo, por razones que ahora explicaré, dicha historia ha sufrido la inclusión de ciertos detalles que jamás han podido ser corroborar, pero que han pasado a formar parte de la leyenda de esta desdichada actriz de forma inexorable. Algunos de esos detalles fueron incluidos en este trabajo, por lo que hemos de verlo como lo que es, un producto de ficción basado en la vida de Frances y no un documental biográfico, que distan mucho de ser lo mismo.
Con esto no quiero decir que estemos ante una mala película o que no merezca la pena disfrutarla, algo que yo les animo a que hagan, ya que merece la pena sin ningún género de dudas, sino que hemos de tener en cuenta que ciertos aspectos están un tanto dramatizados para que el resultado final diese mas juego. Pero para ser justos, esto no es algo que comenzara a la hora de hacer este trabajo, ya que en la autobiografía que escribió la propia actriz junto a Lois Kibbee, titulada Will There Really Be A Morning, que fue publicada dos años después de su muerte, ya se exageraron ciertos aspectos de la vida de la actriz para hacerla mas comercial, como confirmaron posteriormente la propia Lois Kibbee, coautora de las memorias y Jean Ratcliffe, ambas amigas de la actriz.
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La cosa (El enigma de otro mundo) - John Carpenter (1982)
* Título original - The Thing
* Año - 1982
* Duración - 109 min.
* País - Estados Unidos
* Director - John Carpenter
* Guión - Bill Lancaster a partir de la novela de John W. Campbell
* Música - Ennio Morricone
* Fotografía - Dean Cundey
* Productora - Universal Pictures / Turman-Foster Company
* Género - Ciencia ficción, Terror, Fantástico
* Reparto - Kurt Russell, Wilford Brimley, Keith David, David Clennon, Richad Dysart, Donald Moffat, Richard Masur, T.K. Carter, Charles Hallahan, Peter Maloney, Joel Polis, Thomas G. Waites
John Carpenter nos dejó en 1982 el que para muchos es su mejor trabajo. Una película que mezcla terror, intriga y ciencia ficción que transcurre en uno de los lugares mas inhóspitos de nuestro planeta, apartado de toda posibilidad de ayuda inmediata. Un clásico en toda regla que a pesar de los años sigue conservando gran parte de su encanto. Un ejemplo a seguir, en muchas facetas, ante la avalancha de cine de terror de mala calidad que nos inunda últimamente.
La tranquilidad de los miembros de una estación de investigación estadounidense en la Antártida se rompe cuando, a causa de una confusión por no poder comunicarse en el mismo idioma, tienen un enfrentamiento con un grupo noruego, que perseguía a un perro. Tras salir victoriosos y ante la imposibilidad de comunicarse por radio, el piloto R.J. MacReady (Kurt Russell) y el doctor Copper (Richard Dysart) deciden ir en helicóptero a la estación noruega para buscar alguna explicación a lo ocurrido. Allí serán testigos de lo que los noruegos han descubierto en el hielo, despertando sin saberlo a un ser que llevaba miles de años congelado.
La que nos ocupa es un remake del film "El enigma de otro mundo" (1951) de Howard Hawks, estando ambas basadas en el relato corto "Who Goes There?" de John W. Campbell. Es la primera película de la llamada "Trilogía Apocalíptica" que se completaría con "El príncipe de las tinieblas" (1987) y "En la boca del miedo" (1995).
El director consigue con este trabajo echar por tierra la incomprensible tendencia que en la actualidad gobierna el cine de "terror", que deja en manos de la casquería y los efectos especiales todo el peso de la historia, dando de lado a la base de una buena película, un buen guion. Y lo consigue dejando felices a los que no entienden el terror sin escenas sangrientas, pero también a los que necesitan de una buena trama y grandes dosis de intriga para disfrutarlo como es debido.
Destaca sin duda una excelente fotografía que nos envuelve en paisajes helados de un blanco impoluto, lo que contrasta poderosamente con las escenas violentas, donde el rojo se hace el protagonista indiscutible. El hecho de encontrarnos en una estación perdida en la Antártida, unido a la excelente ambientación utilizada, hacen que el espectador experimente una constante sensación de intranquilidad que ira creciendo a medida que avanza el metraje. El ritmo de la película es el adecuado, no llegando a caer en ningún momento.
* Año - 1982
* Duración - 109 min.
* País - Estados Unidos
* Director - John Carpenter
* Guión - Bill Lancaster a partir de la novela de John W. Campbell
* Música - Ennio Morricone
* Fotografía - Dean Cundey
* Productora - Universal Pictures / Turman-Foster Company
* Género - Ciencia ficción, Terror, Fantástico
* Reparto - Kurt Russell, Wilford Brimley, Keith David, David Clennon, Richad Dysart, Donald Moffat, Richard Masur, T.K. Carter, Charles Hallahan, Peter Maloney, Joel Polis, Thomas G. Waites
John Carpenter nos dejó en 1982 el que para muchos es su mejor trabajo. Una película que mezcla terror, intriga y ciencia ficción que transcurre en uno de los lugares mas inhóspitos de nuestro planeta, apartado de toda posibilidad de ayuda inmediata. Un clásico en toda regla que a pesar de los años sigue conservando gran parte de su encanto. Un ejemplo a seguir, en muchas facetas, ante la avalancha de cine de terror de mala calidad que nos inunda últimamente.
La tranquilidad de los miembros de una estación de investigación estadounidense en la Antártida se rompe cuando, a causa de una confusión por no poder comunicarse en el mismo idioma, tienen un enfrentamiento con un grupo noruego, que perseguía a un perro. Tras salir victoriosos y ante la imposibilidad de comunicarse por radio, el piloto R.J. MacReady (Kurt Russell) y el doctor Copper (Richard Dysart) deciden ir en helicóptero a la estación noruega para buscar alguna explicación a lo ocurrido. Allí serán testigos de lo que los noruegos han descubierto en el hielo, despertando sin saberlo a un ser que llevaba miles de años congelado.
La que nos ocupa es un remake del film "El enigma de otro mundo" (1951) de Howard Hawks, estando ambas basadas en el relato corto "Who Goes There?" de John W. Campbell. Es la primera película de la llamada "Trilogía Apocalíptica" que se completaría con "El príncipe de las tinieblas" (1987) y "En la boca del miedo" (1995).
El director consigue con este trabajo echar por tierra la incomprensible tendencia que en la actualidad gobierna el cine de "terror", que deja en manos de la casquería y los efectos especiales todo el peso de la historia, dando de lado a la base de una buena película, un buen guion. Y lo consigue dejando felices a los que no entienden el terror sin escenas sangrientas, pero también a los que necesitan de una buena trama y grandes dosis de intriga para disfrutarlo como es debido.
Destaca sin duda una excelente fotografía que nos envuelve en paisajes helados de un blanco impoluto, lo que contrasta poderosamente con las escenas violentas, donde el rojo se hace el protagonista indiscutible. El hecho de encontrarnos en una estación perdida en la Antártida, unido a la excelente ambientación utilizada, hacen que el espectador experimente una constante sensación de intranquilidad que ira creciendo a medida que avanza el metraje. El ritmo de la película es el adecuado, no llegando a caer en ningún momento.