Título original - Le salaire de la peur
Año - 1953
Duración - 140 min.
País - Francia
Director - H.G. Clouzot (Henri Georges Clouzot)
Guión - H.G. Clouzot y Jerome Geromini, basado en la novela homónima de Georges Arnaud
Música - Georges Auric
Fotografía - Armand Thirard
Montaje - Madeleine Gug, Etiennette Muse y Henri Rust
Producción - Raymond Borderie
Reparto - Yves Montand, Charles Vanel, Vera Clouzot, Peter Van Eyck, Folco Lulli, William Tubbs, Dario Moreno, Jo Dest
Productora - International Affiliates
Género - Drama, Aventuras, Thriller
H.G. Clouzot dirigió, y escribió junto a Jerome Geromini, este excelente trabajo basado en la novela homónima de Georges Arnaud, que consigue brillar en todos sus apartados. Una historia en la que Aventuras, Drama y Thriller van de la mano, excelentemente filmada e interpretada, que consiguió alzarse con la Palma de Oro en el Festival Internacional de Cine de Cannes, el Oso de Oro en el Festival de Berlín y el BAFTA, todos como mejor película. A su favor hay que decir que no ha perdido ni un ápice de fuerza, intriga y emoción con el paso de los años, algo de lo que pocas pueden presumir. Un regalo para los sentidos.
Sinopsis: Mario (Yves Montand) sobrevive como puede junto a su amigo Luigi (Folco Lulli) en un pequeño pueblo donde la pobreza campa a sus anchas y no hay ni siquiera apenas trabajo. La llegada de M. Jo (Charles Vanel), un hombre arrogante y fanfarrón que conoce al encargado de la empresa petrolífera estadounidense que trabaja en la zona, lo hace concebir esperanzas de conseguir un empleo, pero a la hora de la verdad, el único puesto que este ofrece a los trabajadores del pueblo es el transporte de una carga de nitroglicerina, necesaria para apagar el fuego que un accidente ha provocado en uno de los pozos, un trabajo muy bien pagado pero extremadamente arriesgado, por la precariedad de los medios para realizarlo y el difícil terreno por el que han de hacerlo.
El director: Henri-Georges Clouzot fue un director, guionista y productor de cine francés, nacido en Niort, el 20 de noviembre de 1907. Tras comenzar como guionista, debutó en 1933 con el drama Tout pour l'amour, que dirigió junto a Joe May. Su primer trabajo en solitario fue la brillante El asesino vive en el 21 (1942), tras la que filmó la magnífica El cuervo (1943), que fue tachada de colaboracionista, costándole cierta marginación en el cine francés. En su carrera nos ha dejado maravillas como En legítima defensa (1947), Manon (1949), Las diabólicas (1955), El misterio de Picasso (1956), Los espías (1957), La verdad (1960), Giuseppe Verdi: Requiem (1967) o La prisionera (1968), además de la que hoy nos ocupa. Cualquiera de ella merece la pena ser disfrutada, así que avisados quedan.
La película: El salario del miedo es, sin lugar a dudas, uno de los títulos mas completos del cine francés de todos los tiempos, hasta tal punto que, si no fuera por un par de detalles mejorables, se habría ganado la nota máxima que un servidor pueda ponerle a un trabajos, y créanme, no es algo que suceda muy a menudo. Entre las claves para conseguir llevarse los elogios de casi todos están su excelente retrato de sus personajes, un realismo poco común a la hora de mostrar la pobreza, la sensación de falta de libertad o la desesperación y la capacidad que tiene de generar una tensión que pocas veces me ha llegado a transmitir una película.
Vayamos por partes. El guión de H.G. Clouzot y Jerome Geromini es realmente soberbio, aunque a algunos pueda parecerle de un metraje excesivo, ya que alcanza las dos horas y veinte minutos de duración. Destacan en el dos partes bien diferenciadas, la inicial en la que se nos muestra a los diferentes personajes y la sensación de presidiarios con la que viven, que aún siendo tachada de excesivamente extensa por algunos, es para mi fundamental para preparar y cocer a fuego lento los ingredientes que harán brillar en todo su esplendor la segunda parte de la historia. La escena inicial, por poner un ejemplo, es de una maestría indudable a la hora de mostrar las condiciones en las que viven nuestros protagonistas, la miseria y la pobreza que campan a sus anchas.
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Manos peligrosas - Samuel Fuller (1953)
Título original - Pickup on South Street
Año - 1953
Duración - 80 min.
País - Estados Unidos
Director - Samuel Fuller
Guión - Samuel Fuller, basándose en una historia de Dwight Taylor
Música - Leigh Harline
Fotografía - Joe McDonald
Montaje - Nick DeMaggio
Producción - Jules Schermer
Productora - 20th Century Fox
Género - Cine negro. Thriller
Reparto - Richard Widmark, Jean Peters, Thelma Ritter, Richard Kiley, Murvyn Vye, Milburn Stone, Willis Bouchey, Harry Tenbrook, Parley Baer, Virginia Carroll, Wilson Wood
Pickup on South Street fue la sexta película del genial Samuel Fuller, en la que escribe el guión sobre una historia de Dwight Taylor y dirige, una de las pocas obras que realizó bajo el auspicio de un gran estudio, aunque no por ello con un gran presupuesto. Con una soberbia fotografía de Joe MacDonald, la acertada música de Leigh Harline y el protagonismo de Richard Widmark, perfectamente acompañado por Jean Peters y Thelma Ritter, estamos ante una de las obras mas comerciales quizás del director, aunque no por ello deja de ser de lo mejor del género de su década. Una delicia para los sentidos.
Sinopsis: Skip McCoy (Richard Widmark) es un carterista de poca monta que acaba de salir de prisión, por lo que utiliza un viaje en metro para robarle hábilmente la cartera a la señorita Candy (Jean Peters), sin que ella consiga darse cuenta. Pero quien si presencia la escena es el agente Zara (Willis Bouchey), quien estaba siguiendo a la mujer como sospechosa de cooperar con agentes comunistas. Sin saberlo, ella llevaba un microfilm que su antiguo novio Joey (Richard Kiley) le había entregado, siendo parte del botín que Skip ahora posee, algo que puede resultar mucho mas peligroso que el simple robo de una cartera.
La película: Entre la amplia filmografía de Samuel Fuller, en la que le dio tiempo a abordar diferentes géneros, como el western, el drama, el cine bélico, el thriller, etc., este nos dejó varias películas de cine negro, de las que yo destaco dos, Bajos fondos (Underworld U.S.A.), un excelente largometraje de 1961 del que os hablamos en este artículo y esta Manos peligrosas, un trabajo realizado ocho antes años que el anterior con mucha menor fama entre los aficionados, pero que para mi nada tiene que envidiarle al anteriormente mencionado.
La historia de este trabajo es bastante rocambolesca, ya que en un principio se trataba de un guion ya escrito de Dwight Taylor que llevaba por título Blaze of Glory, que Darryl F. Zanuck (productor y director ejecutivo de la 20th Century Fox) enseñó a Fuller, al que le gustó bastante, pero no el hecho de que se desarrollara en el ámbito judicial, por lo que lo reescribió para ambientarlo en el mundo de los bajos fondos. Pero lejos de terminar aquí su historia, este tuvo que ser retocado en varia ocasiones por la censura impuesta con el código Hays, que lo acusaba de excesiva brutalidad y violencia.
Fuller, lejos de impacientarse, volvió a demostrar que lo mas importante para realizar una buena película es disponer de un buen guión, algo de lo que no queda ninguna duda tras disfrutarla. Su ritmo es excelente, sus personajes magníficamente desarrollados, su trama totalmente absorbente, y todo ello a pesar del gran número de trabas que se tuvieron que superar para poder llevarlo a buen puerto. De hecho, incluso el entonces director del FBI, J. Edgar Hoover, llegó a mencionar a Fuller y Zanuck lo poco que le gustaba ciertas cosas de la película, como el carácter anti-patriótico del personaje de Richard Widmark o el hecho de mostrar en pantalla el pago por información a un confidente, aunque finalmente solo le valió para eliminar cualquier mención al FBI en la publicidad y en la propia película.
Año - 1953
Duración - 80 min.
País - Estados Unidos
Director - Samuel Fuller
Guión - Samuel Fuller, basándose en una historia de Dwight Taylor
Música - Leigh Harline
Fotografía - Joe McDonald
Montaje - Nick DeMaggio
Producción - Jules Schermer
Productora - 20th Century Fox
Género - Cine negro. Thriller
Reparto - Richard Widmark, Jean Peters, Thelma Ritter, Richard Kiley, Murvyn Vye, Milburn Stone, Willis Bouchey, Harry Tenbrook, Parley Baer, Virginia Carroll, Wilson Wood
Pickup on South Street fue la sexta película del genial Samuel Fuller, en la que escribe el guión sobre una historia de Dwight Taylor y dirige, una de las pocas obras que realizó bajo el auspicio de un gran estudio, aunque no por ello con un gran presupuesto. Con una soberbia fotografía de Joe MacDonald, la acertada música de Leigh Harline y el protagonismo de Richard Widmark, perfectamente acompañado por Jean Peters y Thelma Ritter, estamos ante una de las obras mas comerciales quizás del director, aunque no por ello deja de ser de lo mejor del género de su década. Una delicia para los sentidos.
Sinopsis: Skip McCoy (Richard Widmark) es un carterista de poca monta que acaba de salir de prisión, por lo que utiliza un viaje en metro para robarle hábilmente la cartera a la señorita Candy (Jean Peters), sin que ella consiga darse cuenta. Pero quien si presencia la escena es el agente Zara (Willis Bouchey), quien estaba siguiendo a la mujer como sospechosa de cooperar con agentes comunistas. Sin saberlo, ella llevaba un microfilm que su antiguo novio Joey (Richard Kiley) le había entregado, siendo parte del botín que Skip ahora posee, algo que puede resultar mucho mas peligroso que el simple robo de una cartera.
La película: Entre la amplia filmografía de Samuel Fuller, en la que le dio tiempo a abordar diferentes géneros, como el western, el drama, el cine bélico, el thriller, etc., este nos dejó varias películas de cine negro, de las que yo destaco dos, Bajos fondos (Underworld U.S.A.), un excelente largometraje de 1961 del que os hablamos en este artículo y esta Manos peligrosas, un trabajo realizado ocho antes años que el anterior con mucha menor fama entre los aficionados, pero que para mi nada tiene que envidiarle al anteriormente mencionado.
La historia de este trabajo es bastante rocambolesca, ya que en un principio se trataba de un guion ya escrito de Dwight Taylor que llevaba por título Blaze of Glory, que Darryl F. Zanuck (productor y director ejecutivo de la 20th Century Fox) enseñó a Fuller, al que le gustó bastante, pero no el hecho de que se desarrollara en el ámbito judicial, por lo que lo reescribió para ambientarlo en el mundo de los bajos fondos. Pero lejos de terminar aquí su historia, este tuvo que ser retocado en varia ocasiones por la censura impuesta con el código Hays, que lo acusaba de excesiva brutalidad y violencia.
Fuller, lejos de impacientarse, volvió a demostrar que lo mas importante para realizar una buena película es disponer de un buen guión, algo de lo que no queda ninguna duda tras disfrutarla. Su ritmo es excelente, sus personajes magníficamente desarrollados, su trama totalmente absorbente, y todo ello a pesar del gran número de trabas que se tuvieron que superar para poder llevarlo a buen puerto. De hecho, incluso el entonces director del FBI, J. Edgar Hoover, llegó a mencionar a Fuller y Zanuck lo poco que le gustaba ciertas cosas de la película, como el carácter anti-patriótico del personaje de Richard Widmark o el hecho de mostrar en pantalla el pago por información a un confidente, aunque finalmente solo le valió para eliminar cualquier mención al FBI en la publicidad y en la propia película.
Los caballeros las prefieren rubias - Howard Hawks (1953)
Título original - Gentlemen Prefer Blondes
Año - 1953
Duración - 91 min.
País - Estados Unidos
Director - Howard Hawks
Guión - Charles Lederer, basado en la novela de Anita Loos
Música - Varios
Fotografía - Harry J. Wild
Montaje - Hugh S. Fowler
Producción - Sol C. Siegel
Productora - 20th Century Fox
Género - Comedia. Musical | Comedia romántica
Reparto - Marilyn Monroe, Jane Russell, Charles Coburn, Tommy Noonan, Elliott Reid, George Winslow
Howard Hawks dirigió, Charles Lederer escribió el guión, y Marilyn Monroe y Jane Russell pusieron todo el glamour, para crear esta coqueta comedia romántica musical, que forma parte de la historia de la edad de oro de Hollywood. Ni de lejos es la mejor película de Hawks, e incluso a much@s puede parecer demasiado simple, pero siempre será una excelente opción para disfrutar de un cine con un encanto que se fue para no volver, ideal para ver en buena compañía. La definición del Glamour...
Sinopsis: Lorelei Lee (Marilyn Monroe) y Dorothy Shaw (Jane Russell) son dos atractivas jóvenes procedentes de una población rural de Arkansas, que actúan como cantantes y bailarinas en varios salones. Mientras Lorelei aparenta ser la más superficial, siendo el sueño de su vida casarse con un hombre rico, Dorothy, mucho mas cabal que su amiga, sueña con encontrar el verdadero amor, sin tener en cuenta la situación económica de su ansiado Romeo. Lolerei tiene enamorado a Gus Esmond (Tommy Noonan), algo que el padre de el no ve con buenos ojos, por lo que contratará al detective Ernie Malone (Elliott Reid), para demostrarle a su hijo que se equivoca con ella.
El director: El director, escritor y productor de cine estadounidense Howard Hawks nació en 1896 en Goshen (Indiana). Escribió un total de 23 guiones, de los cuales solo 11 no fueron dirigidos por el mismo, y produjo 21 películas, casi todas trabajos propios, por lo que tuvo un control sobre su obra muy difícil de encontrar en otros casos.
Se atrevió con innumerables géneros a lo largo de su carrera, aunque fue mas prolífico en tres de ellos, comenzando por el cine negro, del que podemos destacar El código criminal (1931), Scarface, el terror del Hampa (1932), Tener y no tener (1944) y El sueño eterno (1946), estando consideradas las dos últimas, ambas protagonizadas por Bogart y Bacall, como claros estandartes del género. Otro de los géneros anteriormente mencionados fue el western, destacando la llamada 'Saga de los ríos', que comprende Río Rojo (1948), Río Bravo (1959) y Río Lobo (1970), además de Río de sangre (1952) o El Dorado (1966). El tercer género en discordia fue la comedia, donde podemos destacar La comedia de la vida (1934), La fiera de mi niña (1938), Luna nueva (1940), La novia era él (1949) o Los caballeros las prefieren rubias (1953).
Del resto de su filmografía destacaremos títulos dispares como Vivamos hoy (1933), ¡Viva Villa! (1934), La ciudad sin ley (1935), Camino a la gloria (1936), Sólo los ángeles tienen alas (1939), El sargento York (1941), El enigma de otro mundo (1951) o Hatari (1962). Como veréis hay cantidad y calidad donde elegir, por lo que es uno de los directores a disfrutar en todas sus facetas, además de uno de los mas completos que ha dado este arte.
La película: Corría el año 1953 y los ecos de esa maravillosa película recién estrenada, titulada Niágara, permanecían frescos en los paladares de los aficionados al cine. La dirección de Henry Hathaway, la maravillosa fotografía de Joseph MacDonald y el magnífico guión de Charles Brackett, Walter Reisch y Richard Breen, habían dado pie al melodrama en el que una hermosa y cautivadora mujer infiel (Marilyn Monroe), decidía deshacerse de su esposo (Joseph Cotten), aprovechando un viaje a las famosas cataratas. La chica de voluptuoso cuerpo y rubias cabelleras, había conseguido cautivar ya a medio planeta.
Año - 1953
Duración - 91 min.
País - Estados Unidos
Director - Howard Hawks
Guión - Charles Lederer, basado en la novela de Anita Loos
Música - Varios
Fotografía - Harry J. Wild
Montaje - Hugh S. Fowler
Producción - Sol C. Siegel
Productora - 20th Century Fox
Género - Comedia. Musical | Comedia romántica
Reparto - Marilyn Monroe, Jane Russell, Charles Coburn, Tommy Noonan, Elliott Reid, George Winslow
Howard Hawks dirigió, Charles Lederer escribió el guión, y Marilyn Monroe y Jane Russell pusieron todo el glamour, para crear esta coqueta comedia romántica musical, que forma parte de la historia de la edad de oro de Hollywood. Ni de lejos es la mejor película de Hawks, e incluso a much@s puede parecer demasiado simple, pero siempre será una excelente opción para disfrutar de un cine con un encanto que se fue para no volver, ideal para ver en buena compañía. La definición del Glamour...
Sinopsis: Lorelei Lee (Marilyn Monroe) y Dorothy Shaw (Jane Russell) son dos atractivas jóvenes procedentes de una población rural de Arkansas, que actúan como cantantes y bailarinas en varios salones. Mientras Lorelei aparenta ser la más superficial, siendo el sueño de su vida casarse con un hombre rico, Dorothy, mucho mas cabal que su amiga, sueña con encontrar el verdadero amor, sin tener en cuenta la situación económica de su ansiado Romeo. Lolerei tiene enamorado a Gus Esmond (Tommy Noonan), algo que el padre de el no ve con buenos ojos, por lo que contratará al detective Ernie Malone (Elliott Reid), para demostrarle a su hijo que se equivoca con ella.
El director: El director, escritor y productor de cine estadounidense Howard Hawks nació en 1896 en Goshen (Indiana). Escribió un total de 23 guiones, de los cuales solo 11 no fueron dirigidos por el mismo, y produjo 21 películas, casi todas trabajos propios, por lo que tuvo un control sobre su obra muy difícil de encontrar en otros casos.
Se atrevió con innumerables géneros a lo largo de su carrera, aunque fue mas prolífico en tres de ellos, comenzando por el cine negro, del que podemos destacar El código criminal (1931), Scarface, el terror del Hampa (1932), Tener y no tener (1944) y El sueño eterno (1946), estando consideradas las dos últimas, ambas protagonizadas por Bogart y Bacall, como claros estandartes del género. Otro de los géneros anteriormente mencionados fue el western, destacando la llamada 'Saga de los ríos', que comprende Río Rojo (1948), Río Bravo (1959) y Río Lobo (1970), además de Río de sangre (1952) o El Dorado (1966). El tercer género en discordia fue la comedia, donde podemos destacar La comedia de la vida (1934), La fiera de mi niña (1938), Luna nueva (1940), La novia era él (1949) o Los caballeros las prefieren rubias (1953).
Del resto de su filmografía destacaremos títulos dispares como Vivamos hoy (1933), ¡Viva Villa! (1934), La ciudad sin ley (1935), Camino a la gloria (1936), Sólo los ángeles tienen alas (1939), El sargento York (1941), El enigma de otro mundo (1951) o Hatari (1962). Como veréis hay cantidad y calidad donde elegir, por lo que es uno de los directores a disfrutar en todas sus facetas, además de uno de los mas completos que ha dado este arte.
La película: Corría el año 1953 y los ecos de esa maravillosa película recién estrenada, titulada Niágara, permanecían frescos en los paladares de los aficionados al cine. La dirección de Henry Hathaway, la maravillosa fotografía de Joseph MacDonald y el magnífico guión de Charles Brackett, Walter Reisch y Richard Breen, habían dado pie al melodrama en el que una hermosa y cautivadora mujer infiel (Marilyn Monroe), decidía deshacerse de su esposo (Joseph Cotten), aprovechando un viaje a las famosas cataratas. La chica de voluptuoso cuerpo y rubias cabelleras, había conseguido cautivar ya a medio planeta.
Pinceladas de clásicos del terror: Los crímenes del museo de cera - André De Toth (1953)
* Título original - House of Wax
* Año - 1953
* Duración - 88 min.
* País - Estados Unidos
* Director - André De Toth
* Guión - Crane Wilbur
* Música - David Buttolph
* Maquillaje - Gordon Bau
* Fotografía - Bert Glennon
* Dirección artística - Stanley Fleischer
* Producción - Bryan Foy
* Productora - Warner Bros. Pictures
* Género - Terror, Intriga
* Reparto - Vincent Price, Phyllis Kirk, Frank Lovejoy, Carolyn Jones, Paul Cavanagh, Paul Picerni, Roy Roberts, Charles Bronson
Tras la espectación que produjo 'Bwana Devil' (1952), la primera película realizada en formato 3D, el estudio Warner Brothers decidió producir un filme utilizando dicha tecnología, para lo que encargó al director André De Toth la realización de un remake de la película 'Mystery of the Wax Museum' de 1933. En ella el protagonismo recaló en un Vincent Price, que iniciaría así un idilio con el cine de terror, género donde ha desarrollado el grueso de su inolvidable carrera.
Sinopsis: El escultor de figuras de cera Henry Jarrod (Vincent Price) tiene una relación muy especial con sus obras con las que incluso conversa, en especial con Maria Antonieta, que es su favorita. Pero su socio Matthew Burke (Roy Roberts) tiene otros planes que necesitan financiación urgente, por lo que tras no poder persuadir a Jarrod para quemar el museo y cobrar la cuantiosa indemnización del seguro, lo hará por su propia cuenta. Años mas tarde, Jarrod intenta abrir su propio museo, mientras que una serie de extrañas desapariciones se producen.
El director: André De Toth fue un director de cine estadounidense de origen húngaro que a pesar de licenciarse en derecho se vio atraído por el mundo del teatro uniéndose al autor húngaro Ferenc Molnár, con el que comenzó a escribir. En su paso al mundo del cine trabaja como escritor, asistente de dirección, actor y finalmente como director.
Dirigió media docena de películas en Europa, pero como pasó con tantos profesionales de todo tipo, el comienzo de la segunda guerra mundial lo hace trasladarse primero a Inglaterra, donde trabaja como asistente de su compatriota Alexander Korda, hasta que en 1942 se traslada a Estados Unidos. Llega a tener un acuerdo verbal con la Columbia, pero no llega a rubricarlo para realizar de forma independiente.
Se caracteriza por haber realizado trabajos muy variados, tocando el cine negro, el de terror, el romántico, el western, el de espías y el de acción durante su dilatada carrera que se extiende durante tres décadas, aunque he de decirles que la película que nos ocupa hoy es la mas recordada del director. Destacan también algunos westerns, como 'El honor del Capitán Lex', protagonizada por Gary Cooper en 1952 o los protagonizados por Randolph Scott, como 'El hombre de la diligencia' o 'Cazador de Forajidos', ambas de 1954, al igual que dos incursiones en el cine negro, 'Aguas turbias' en 1944 y 'Pitfall' en 1948. Ya en 1968 realizó la película de acción 'Mercenarios sin gloria', protagonizada por Michael Caine.
Como curiosidad decirles que perdió un ojo a una edad muy temprana, lo que le une al grupo de ilustres directores con la misma fatalidad junto a John Ford, Raoul Walsh, Nicholas Ray y Fritz Lang. Es esta también la razón por la que no pudo disfrutar el fruto de su trabajo en 3-D.
La película: 'Los crímenes del museo de cera' es una de las películas mas completas que podemos encontrar dentro de su época y género. En ello tiene mucho que ver la brillante dirección de André De Toth, que firma aquí lo mejorcito que realizó en su carrera, al menos en mi humilde opinión. Consigue exprimir al máximo la historia, manteniendo la tensión hasta el último momento con un ritmo muy oportuno, a lo que ayuda y mucho el excelente guión de Crane Wilbur, que consigue proponer diversas alternativas en su desarrollo que hacen que la previsibilidad nos llegue con la cinta ya muy avanzada, ademas de dosificar con inteligencia las escenas de mayor desasosiego durante todo el metraje.
* Año - 1953
* Duración - 88 min.
* País - Estados Unidos
* Director - André De Toth
* Guión - Crane Wilbur
* Música - David Buttolph
* Maquillaje - Gordon Bau
* Fotografía - Bert Glennon
* Dirección artística - Stanley Fleischer
* Producción - Bryan Foy
* Productora - Warner Bros. Pictures
* Género - Terror, Intriga
* Reparto - Vincent Price, Phyllis Kirk, Frank Lovejoy, Carolyn Jones, Paul Cavanagh, Paul Picerni, Roy Roberts, Charles Bronson
Tras la espectación que produjo 'Bwana Devil' (1952), la primera película realizada en formato 3D, el estudio Warner Brothers decidió producir un filme utilizando dicha tecnología, para lo que encargó al director André De Toth la realización de un remake de la película 'Mystery of the Wax Museum' de 1933. En ella el protagonismo recaló en un Vincent Price, que iniciaría así un idilio con el cine de terror, género donde ha desarrollado el grueso de su inolvidable carrera.
Sinopsis: El escultor de figuras de cera Henry Jarrod (Vincent Price) tiene una relación muy especial con sus obras con las que incluso conversa, en especial con Maria Antonieta, que es su favorita. Pero su socio Matthew Burke (Roy Roberts) tiene otros planes que necesitan financiación urgente, por lo que tras no poder persuadir a Jarrod para quemar el museo y cobrar la cuantiosa indemnización del seguro, lo hará por su propia cuenta. Años mas tarde, Jarrod intenta abrir su propio museo, mientras que una serie de extrañas desapariciones se producen.
El director: André De Toth fue un director de cine estadounidense de origen húngaro que a pesar de licenciarse en derecho se vio atraído por el mundo del teatro uniéndose al autor húngaro Ferenc Molnár, con el que comenzó a escribir. En su paso al mundo del cine trabaja como escritor, asistente de dirección, actor y finalmente como director.
Dirigió media docena de películas en Europa, pero como pasó con tantos profesionales de todo tipo, el comienzo de la segunda guerra mundial lo hace trasladarse primero a Inglaterra, donde trabaja como asistente de su compatriota Alexander Korda, hasta que en 1942 se traslada a Estados Unidos. Llega a tener un acuerdo verbal con la Columbia, pero no llega a rubricarlo para realizar de forma independiente.
Se caracteriza por haber realizado trabajos muy variados, tocando el cine negro, el de terror, el romántico, el western, el de espías y el de acción durante su dilatada carrera que se extiende durante tres décadas, aunque he de decirles que la película que nos ocupa hoy es la mas recordada del director. Destacan también algunos westerns, como 'El honor del Capitán Lex', protagonizada por Gary Cooper en 1952 o los protagonizados por Randolph Scott, como 'El hombre de la diligencia' o 'Cazador de Forajidos', ambas de 1954, al igual que dos incursiones en el cine negro, 'Aguas turbias' en 1944 y 'Pitfall' en 1948. Ya en 1968 realizó la película de acción 'Mercenarios sin gloria', protagonizada por Michael Caine.
Como curiosidad decirles que perdió un ojo a una edad muy temprana, lo que le une al grupo de ilustres directores con la misma fatalidad junto a John Ford, Raoul Walsh, Nicholas Ray y Fritz Lang. Es esta también la razón por la que no pudo disfrutar el fruto de su trabajo en 3-D.
La película: 'Los crímenes del museo de cera' es una de las películas mas completas que podemos encontrar dentro de su época y género. En ello tiene mucho que ver la brillante dirección de André De Toth, que firma aquí lo mejorcito que realizó en su carrera, al menos en mi humilde opinión. Consigue exprimir al máximo la historia, manteniendo la tensión hasta el último momento con un ritmo muy oportuno, a lo que ayuda y mucho el excelente guión de Crane Wilbur, que consigue proponer diversas alternativas en su desarrollo que hacen que la previsibilidad nos llegue con la cinta ya muy avanzada, ademas de dosificar con inteligencia las escenas de mayor desasosiego durante todo el metraje.
Los sobornados - Fritz Lang (1953)
* Título original - The Big Heat
* Año - 1953
* Duración - 90 min.
* País - Estados Unidos
* Director - Fritz Lang
* Guión - Sydney Boehm basado en la novela de William P. McGivern
* Música - Daniele Amfitheatrof
* Fotografía - Charles Lang
* Productora - Columbia Pictures
* Género - Cine negro. Intriga. Thriller
* Reparto - Glenn Ford, Gloria Grahame, Jocelyn Brando, Alexander Scourby, Lee Marvin, Jeanette Nolan, Peter Whitney, Willis Bouchey, Robert Burton, Adam Williams, Howard Wendell, Chris Alcaide
El director austriaco Fritz Lang volvió a dejarnos con 'Los sobornados' otra de las obras cumbre del cine negro. Con un excelente guión de Sydney Boehm, basado en una novela de William P. McGivern, un magnífico reparto y su enorme destreza tras la cámara, hará las delicias de los amantes del género y del cine en general. Cine con mayúsculas para disfrutar en cualquier momento.
Sinopsis: El sargento Bannion (Glenn Ford) es el encargado de investigar el suicidio de un compañero del departamento. Parece un caso rutinario, ya que la esposa del difunto (Jeannette Nolan) alega que padecía de algún tipo de enfermedad que ocultaba a todos, incluso a ella. Pero la llamada de una joven que confiesa tener una aventura con el y afirma que se encontraba perfectamente hace sospechar a Bannion que hay algo que se le escapa y decide continuar con la investigación, a pesar de las continuas trabas que encuentra.
El director: Hablar de una leyenda tras las cámaras como Fritz Lang es siempre un placer para mi, aunque poco se puede decir ya de el a los que son conocedores de su obra. Si no es así, creo que es uno de los ineludibles a la hora de ponerse a ver cine clásico, tanto si es cine negro, como hoy es el caso, como en cualquier otro género, ya que su amplia obra abarca una infinidad de títulos al cual mejor.
Desde su época alemana en la que contribuyó al movimiento expresionista alemán dirigiendo clásicos como 'Metrópolis' (1927) o 'M, el vampiro de Düsseldorf' (1931), hasta su obligado exilio en Hollywood, donde se convirtió en uno de los principales artífices del cine negro, ademas de abarcar otros géneros como el drama o el thriller, su obra es altamente recomendable, ya que pocos directores son y serán capaces de mantener tal calidad en su trabajo durante toda su carrera.
Títulos como 'El testamento del Dr. Mabuse' (1933), 'Furia' (1936), 'Sólo se vive una vez' (1937), 'El hombre atrapado' (1941), 'La mujer del cuadro' (1944) nuestra reseña, 'Perversidad' (1945) o 'Encubridora' (1952), son solo algunos ejemplos de su extensa y magnífica filmografía, de la que cualquier título merece la pena ser visualizado.
* Año - 1953
* Duración - 90 min.
* País - Estados Unidos
* Director - Fritz Lang
* Guión - Sydney Boehm basado en la novela de William P. McGivern
* Música - Daniele Amfitheatrof
* Fotografía - Charles Lang
* Productora - Columbia Pictures
* Género - Cine negro. Intriga. Thriller
* Reparto - Glenn Ford, Gloria Grahame, Jocelyn Brando, Alexander Scourby, Lee Marvin, Jeanette Nolan, Peter Whitney, Willis Bouchey, Robert Burton, Adam Williams, Howard Wendell, Chris Alcaide
El director austriaco Fritz Lang volvió a dejarnos con 'Los sobornados' otra de las obras cumbre del cine negro. Con un excelente guión de Sydney Boehm, basado en una novela de William P. McGivern, un magnífico reparto y su enorme destreza tras la cámara, hará las delicias de los amantes del género y del cine en general. Cine con mayúsculas para disfrutar en cualquier momento.
Sinopsis: El sargento Bannion (Glenn Ford) es el encargado de investigar el suicidio de un compañero del departamento. Parece un caso rutinario, ya que la esposa del difunto (Jeannette Nolan) alega que padecía de algún tipo de enfermedad que ocultaba a todos, incluso a ella. Pero la llamada de una joven que confiesa tener una aventura con el y afirma que se encontraba perfectamente hace sospechar a Bannion que hay algo que se le escapa y decide continuar con la investigación, a pesar de las continuas trabas que encuentra.
El director: Hablar de una leyenda tras las cámaras como Fritz Lang es siempre un placer para mi, aunque poco se puede decir ya de el a los que son conocedores de su obra. Si no es así, creo que es uno de los ineludibles a la hora de ponerse a ver cine clásico, tanto si es cine negro, como hoy es el caso, como en cualquier otro género, ya que su amplia obra abarca una infinidad de títulos al cual mejor.
Desde su época alemana en la que contribuyó al movimiento expresionista alemán dirigiendo clásicos como 'Metrópolis' (1927) o 'M, el vampiro de Düsseldorf' (1931), hasta su obligado exilio en Hollywood, donde se convirtió en uno de los principales artífices del cine negro, ademas de abarcar otros géneros como el drama o el thriller, su obra es altamente recomendable, ya que pocos directores son y serán capaces de mantener tal calidad en su trabajo durante toda su carrera.
Títulos como 'El testamento del Dr. Mabuse' (1933), 'Furia' (1936), 'Sólo se vive una vez' (1937), 'El hombre atrapado' (1941), 'La mujer del cuadro' (1944) nuestra reseña, 'Perversidad' (1945) o 'Encubridora' (1952), son solo algunos ejemplos de su extensa y magnífica filmografía, de la que cualquier título merece la pena ser visualizado.