Harry Brown - Daniel Barber (2009)

Título original - Harry Brown
Año - 2009
Duración - 103 min.
País - Reino Unido
Dirección - Daniel Barber
Guión - Gary Young
Música - Ruth Barrett y Martin Phipps
Fotografía - Martin Ruhe
Montaje - Joe Walker
Producción - Matthew Vaughn, Kris Thykier, Matthew Brown y Keith Bell
Productora - Marv Films / Prescience Film Fund / UK Film Council
Género - Thriller, Drama
Reparto - Michael Caine, Emily Mortimer, Iain Glen, Jack O'Connell, Liam Cunningham, Sean Harris, Amy Steel, Ben Drew, David Bradley, Raza Jaffrey, Joseph Gilgun, Charlie Creed-Miles, Chris Wilson


Harry Brown es el título de la ópera prima del realizador Daniel Barber, que tras haber sido candidato a los Oscars con el cortometraje The Tonto Woman (2008), iniciaba su andadura con este modesto largometraje. Un trabajo que vuelve a mostrarnos la historia del ciudadano de a pie al que llevan al límite, por lo que decide tomarse la justicia por su cuenta. Nada nuevo bajo el sol, aunque el simple hecho de ser Sir Michael Caine quien le de vida, es suficiente para disfrutarla y convertirla en muy recomendable. Siempre es un placer disfrutar del magnífico trabajo de uno de los más grandes. 


Sinopsis - Harry Brown (Michael Caine) es un militar retirado que pasa sus días entre el cuidado de su esposa enferma y sus partidas de ajedrez frente a su amigo Leonard Attwell (David Bradley). Vive en un barrio en el que la delincuencia y el tráfico de drogas lo dominan todo e impide que sus habitantes puedan convivir en paz. Pero cuando ve como todo lo que le queda en la vida se desvanece ante sus ojos, decide intentar hacer justicia, le cueste lo que le cueste.

El directorDaniel Barber es un director de cine y publicidad británico nacido en Londres. Estudió diseño gráfico en la Escuela de Arte de St Martins, donde se graduó en 1988. Posteriormente se unió al departamento de televisión de Lambie-Naim and Co. En 1993 se unió a Rose Hackney Productions donde comenzó a dirigir publicidad. Su trabajo se exhibió en el Festival Internacional de Publicidad de Cannes y, en 1994, fue nombrado Cara Creativa del Futuro por la revista Campaign y uno de los directores comerciales "Hotshot" del Reino Unido. En 1995, se convirtió en socio y Rose Hackney pasó a llamarse Rose Hackney Barber. Ha ganado docenas de premios por sus comerciales, tanto en Europa como en los Estados Unidos. En 2003, su trabajo también se incluyó en el top ten de los 100 mejores comerciales de Channel 4 .

En el mundo del cine no se ha prodigado mucho. Tras el mediometraje The Tonto Woman (2008), un western de 35 minutos basado en un cuento de Elmore Leonard con el que fue candidato a los Oscars, dirigió Harry Brown, tras la que continuó dedicando la mayor parte de su tiempo a la publicidad. Su segundo largometraje fue En defensa propia (The Keeping Room, 2014), un western sobre la guerra de Secesión en cuyo reparto aparecen nombres como Brit Marling, Hailee Steinfeld, Muna Otaru, Sam Worthington y Kyle Soller, entre otros.

La película - En el mundo del cine abundan los justicieros que actúan al margen de la ley, ciudadanos de a pie que, por un motivo u otro, deciden echar una mano a la sociedad haciendo limpieza de indeseables y todo tipo de criminales por su cuenta y riesgo. De entre todos ellos me vienen a la mente nombres como Paul Kersey, interpretado por Charles Bronson en títulos como El justiciero de la ciudad (Michael Winner, 1974), Yo soy la justicia (Michael Winner, 1981), El justiciero de la noche (Michael Winner, 1984), Yo soy la justicia 2 (J. Lee Thompson, 1987) y Venganza personal (Allan A. Goldstein, 1994). En El justiciero (Eli Roth, 2018) pasó a ser interpretado por Bruce Willis. Otro de los mas memorables es el bueno de Harry Callahan, interpretado por Clint Eastwood en títulos como Harry el sucio (Don Siegel, 1971), Harry el fuerte (Ted Post, 1973), Harry el ejecutor (James Fargo y Robert Daley, 1976), Impacto súbito (Clint Eastwood, 1983) y La lista negra (Buddy Van Horn, 1988).


Más recientemente tenemos a Bryan Mills, interpretado por Liam Neeson en Venganza (Pierre Morel, 2008), Venganza: Conexión Estambul (Olivier Megaton, 2012) y Venganza 3 (Olivier Megaton, 2015). Me vienen a la cabeza nombres como Steven Seagal, que ha interpretado a varios durante su carrera, Robert de Niro que da vida a Travis Bickle en la memorable Taxi Driver (Martin Scorsese, 1976) o el propio Michael Caine, que interpreta a Jack Carter en Get Carter (Mike Hodges, 1971). La lista es interminable.

Expediente 64 (Los casos del Departamento Q) - Christoffer Boe (2018)

Título original - Journal 64
Año - 2018
Duración - 100 min.
País - Dinamarca
Dirección - Christoffer Boe
Guión - Nikolaj Arcel, Bo Hr. Hansen y Mikkel Nørgaard, basado en la novela de Jussi Adler-Olsen
Música - Mikkel Maltha, Anthony Lledo
Fotografía - Jacob Møller
Montaje - Janus Billeskov Jansen y My Thordal
Producción - Louise Vesth
Productora - Det Danske Filminstitut / Deutscher Filmförderfonds / Film I Väst / Filmförderung Hamburg Schleswig-Holstein / Nordmedia Fonds / Zentropa Production
Reparto - Nikolaj Lie Kaas, Fares Fares, Nicolas Bro, Anders Hove, Søren Pilmark, Morten Bjørn, Elliott Crosset Hove, Diem Camille Gbogou, Anders Juul, Fanny Bornedal, Johanne Louise Schmidt, Clara Rosager, Amanda Radeljak, Nastja Arcel, Michael Brostrup, Per Tofte Nielsen, Marianne Høgsbro, Morten Feldt, Lennart Falk
Género - Thriller, Intriga

Journal 64 (Expediente 64 en nuestro país) es la cuarta entrega de la saga Los casos del Departamento Q, que tal como hacen sus antecesoras, lleva a la pantalla una de las novelas de la escritora Jussi Adler-Olsen. En esta ocasión es el realizador Christoffer Boe el que asume el mando, el cual no solo consigue mantener el nivel de las dos primeras entregas, sino que es capaz de subir este con respecto a su antecesora, la mas floja de la saga para mi gusto, aunque igualmente recomendable. Cine policiaco con alma y señas de identidad propias que merece la pena disfrutar. Por cierto, muy espinoso, y para muchos desconocido, el tema que trata este nuevo caso.


Sinopsis - Cuando unos obreros que van a comenzar una reforma encuentran lo que parece un tabique falso, no imaginan que tras el existe una habitación en la que, sentados alrededor de una mesa, permanecen tres cadáveres momificados junto a una cuarta silla vacía. Cuando los miembros del Departamento Q comienzan a investigar quienes son, descubren que todos tienen en común haber estado relacionados con una antigua institución, que funcionaba como una casa de acogida/internado situada en una pequeña isla, cerrada ya hace años.

El directorChristoffer Boe es un director de cine y guionista danés nacido en Rungsted, al norte de Copenhague, en 1974. Tras estudiar historia del cine en la Universidad de Indiana, continuó sus estudios en la Universidad de Copenhague. En 1997 fue aceptado en el curso de director de la Escuela Nacional de Cine de Dinamarca, donde antes de licenciarse dirigió una trilogía de cortometrajes: Obsession (1999), Virginity (2000) y Anxiety (2001).

Su prometedor debut fue el drama romántico Reconstruction (2003), con el que ganó la Cámara de Oro en Cannes y el premio a la mejor película en el Festival de Sofía. En el 2004 dirigió el segmento Europa no existe, con el que representó a Dinamarca en el largometraje Visiones de Europa. Tra ella llegaron el drama surrealista Allegro (2005), el drama romántico Offscreen (2006), el thriller Todo irá bien (Everything Will Be Fine) (2010), el cortometraje fantástico Kill (2011), el drama psicológico Beast (2011), la comedia dramática Sexo, drogas e impuestos (2013), la miniserie de acción El combatiente (2018), la comedia negra The Hitman's Guide to Housecleaning (2019) y la serie de intriga Cara a cara (Forhøret) (2019).

La película - Hablar de Los casos del Departamento Q se ha convertido para mi en una agradable tradición, ya que desde el comienzo de la saga he tenido el placer de ir escribiendo sobre cada entrega. Si habéis disfrutado de las anteriores, sabéis ya de que va la cosa, pero si es vuestra primera incursión en ella y os gusta el cine policiaco, os aconsejo verlas en el orden en el que han sido estrenadas: Misericordia (2013), de la que os hablamos en este artículo, Profanación (2014), que comentamos en este artículo y Redención (2016), de la que dimos cuenta en este otro artículo. ¿El motivo? Muy fácil: cada largometraje trata de un caso completamente distinto y sin relación alguna con los demás, que podríamos disfrutar por separado, pero las relaciones entre los personajes si que evolucionan conforme van llegando las diferentes entregas. Por otra parte deciros que si no os llena la primera, difícilmente lo harán sus sucesoras, ya que todas tienen un estilo propio común.


Expediente 64 además se atreve con una enorme espina clavada en la historia de varios países del centro y norte de europa, que por muy avanzados que puedan parecernos en la actualidad, también han de lamentar episodios abochornantes del pasado. En el caso danés concretamente, el uso que durante cinco largas décadas (de los años 20 a los años 60) se dio a instituciones esparcidas por todo el país, que ejercían de sanatorios/cárceles de mujeres, para las que no seguían los cánones establecidos por una sociedad puritana y machista como pocas, muy bien camufladas como internados para chicas. En muchas de ellas se las castigaba de mil y una formas sin siquiera demostrar delito alguno cometido, siendo prácticamente imposible escapar de ellas.

Pinceladas de clásicos del terror: La semilla del diablo (Rosemary's Baby) - Roman Polański (1968)

Título original - Rosemary's Baby
Año - 1968
Duración - 136 min.
País - Estados Unidos
Dirección - Roman Polanski
Guión - Roman Polanski, basado en la novela de Ira Levin
Música - Christopher Komeda
Fotografía - William A. Fraker
Montaje - Sam O'Steen y Bob Wyman
Producción - William Castle
Productora - William Castle Productions. Distribuida por Paramount Pictures
Género - Terror. Drama
Reparto - Mia Farrow, John Cassavetes, Ruth Gordon, Ralph Bellamy, Sidney Blackmer, Maurice Evans, Victoria Vetri, Patsy Kelly, Elisha Cook Jr., Charles Grodin, D'Urville Martin, Emmaline Henry, Hanna Landy, Phil Leeds, Hope Summers, Marianne Gordon, Wende Wagner

Cuando los años 60 se acercaban ya a su inevitable ocaso, el realizador Roman Polański escribió y dirigió Rosemary's Baby, a la que en nuestro país se le puso el desafortunado título de La semilla del diablo. Una magnífica obra en la que se da una lección magistral de como crear una atmósfera tóxica, que crece de manera constante e inexorable hasta su final, con la inocente Rosemary Woodhouse (Mia Farrow) como constante centro de atención. Un trabajo del que deberían mamar los que se dedican a esto del terror, capaz de tener al espectador en vilo sin necesidad de subidas enérgicas de volumen ni sustos fáciles. Imprescindible.


Sinopsis - Los Woodhouse, un matrimonio neoyorquino, se mudan a un edificio situado frente a Central Park, sobre el cual, según un amigo, pesa una maldición. Una vez instalados, se hacen amigos de Minnie y Roman Castevet, unos vecinos que los colman de atenciones. Ante la perspectiva de un buen futuro, los Woodhouse deciden tener un hijo; pero, cuando Rosemary se queda embarazada, lo único que recuerda es haber hecho el amor con una extraña criatura que le ha dejado el cuerpo lleno de marcas. Con el paso del tiempo, Rosemary empieza a sospechar que su embarazo no es normal.

El director - Hablar de Roman Polanski es hablar de uno de los directores más polémicos y que más han dado que hablar en el mundo del cine. Hechos como el asesinato de su esposa, la actriz Sharon Tate que se encontraba embarazada de ocho meses, a manos de la banda de Charles Manson o las acusaciones de abusos sexuales de Samantha Gailey, supuestos hechos ocurridos cuando ella tenía solo 13 años, son claras muestras de lo que les comento, aunque me limitaré a hablar de su obra, que por otra parte es a lo que nos dedicamos aquí.

Repulsión, Roman, PolanskiEn cuanto a su carrera artística, ha ejercido como director, productor, guionista y actor, teniendo nacionalidad polaca y habiendo nacido en Francia. Comenzó su carrera como actor teatral, tras lo que cursó estudios en la Escuela de Cine de Łódź. Tras realizar varios cortos entre los que destacan Dos hombres y un armario (1958), La lámpara (1959) y Ángeles caídos (1959), dirigió su primer largometraje, El cuchillo en el agua (1962), iniciando una de sus mejores épocas como director en la que destacan Repulsión (1965) Callejón sin salida (1966) o El baile de los vampiros (1967)), además de la que hoy nos ocupa.

Del resto de su extensa filmografía podemos destacar títulos como Chinatown (1974), El quimérico inquilino (1976), Tess (1979), Frenético (1988), Lunas de hiel (1992), La muerte y la doncella (1994), El pianista (2002), El escritor (2010), Un dios salvaje (2011), La Venus de las pieles (2013), Basada en hechos reales (2017) o la reciente El oficial y el espía (2019), por nombrar algunas de las de mayor calidad. Como curiosidad comentar que no ha vuelto a pisar ni Estados Unidos, ni el Reino Unido, por temor a ser recluido en prisión o extraditado, por lo que no asistió a la ceremonia de los Óscars de 2002, en la que obtuvo el Óscar al mejor director por El Pianista, y tuvo que rodar la película Oliver Twist en Praga, con actores británicos. Os dejo también el nombre de 3 documentales sobre el director, por si estáis interesados: Roman Polanski: Se busca (2008), dirigido por Marina Zenovich, Confesiones de Roman Polanski (2011), dirigido por Laurent Bouzereau y Roman Polanski: Odd Man Out (2012), nuevamente dirigido por Marina Zenovich.

La película - Con más de medio siglo ya a sus espaldas, lo mejor que creo se puede decir de Rosemary's Baby es que no ha perdido un ápice de su potencia original, algo realmente complicado de conseguir, con lo que ha cambiado el cine desde aquellos entonces. Estamos ante un trabajo donde cada detalle está cuidado a la perfección, de forma casi obsesiva, diría yo, algo que tuvieron que sufrir los que por aquellos entonces participaron en un proyecto que, finalmente Roman Polański hizo suyo. Su obsesión por la minuciosa planificación, su enorme egocentrismo y su enorme intransigencia con ideas provenientes de otras personas, tienen gran parte de culpa de todo esto. Tan solo con leer lo que declaró en una entrevista casi dos décadas después, nos podemos hacer una idea de ello: “Me estimulo repitiéndome a mí mismo que soy el mejor, un genio. Mientras trabajo en una película, estoy convencido de que será un gran éxito. Por eso le exijo a la gente con la que trabajo todo tipo de cosas que no les pediría normalmente”.


Y es que en ocasiones como esta, es cuando más se nota la importancia de tomar ciertas decisiones, para bien o para mal, tanto en el cine como en la vida misma. Inicialmente se pensó en el maestro Alfred Hitchcock para dirigirla, algo que tras no llegar a buen puerto pudo hacer que el productor y director William Castle tomara las riendas del proyecto. Finalmente fue Roman Polanski el elegido, gracias a la insistencia de Robert Evans, productor de la Paramount, que abrió de par en par las puertas de Hollywood al realizador polaco y las de su particular infierno al elenco contratado para filmarla. Era la primera oportunidad del cineasta polaco en Hollywood y no la dejaría pasar.